El seleccionado dirigido por Lionel Scaloni venció al conjunto peruano por 2-0 este martes con goles de Lionel Messi y mantiene puntaje perfecto en las Eliminatorias.
Arrancó ganando el martes y terminó triunfando el miércoles. El partido comenzó cerca de las 23 horas de nuestro país y culminó cuando ya había comenzado este miércoles.
Fue una actuación muy convincente del equipo argentino. Perú fue rival durante la primera media hora, con un par de aproximaciones de Paolo Guerrero, el ex delantero de Racing que actualmente brilla en la Liga de Quito en Ecuador.
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Es un jugador de jerarquía, pero claro, ya con sus 40 años, lo que tiene para ofrecer son ráfagas. Del otro lado, Argentina mostró a Lionel Messi encendido, el mejor jugador del planeta, quien jugó todo el partido.
Lionel Scaloni contó luego que, cuando iban 5 minutos del segundo tiempo, aprovechó una ventana de cambios por algunas contingencias que el juego le presentaba al equipo nacional.
Messi le dijo: "Estoy para seguir", y así jugó los 90 y pico que duró el encuentro. El primer gol, un clásico de Leo, fue una acción rápida en un contraataque con Julián Álvarez, Enzo Fernández centró y Messi definió en la zona, matando el centro de Nicolás González y poniendo la pelota arriba,incrustándola en el arco de Gallese.
El segundo gol fue muy parecido a esos que solía convertir mucho en el Barcelona, en ese movimiento que hacía habitualmente con Jordi Alba. De hecho, Jordi Alba se mudó a Miami para seguir creciendo con esa misma acción, marcando goles para el equipo de la Florida en la Major League.
Argentina volvió a ganar y mostró algunos destellos de muy buen juego. Incluso se sobrepuso a un par de situaciones imprevistas, como la lesión de Gonzalo Montiel. El ingreso de Lucas Martínez Quarta cubrió su lugar en el campo, ya que Montiel había reemplazado al otro lateral derecho original, Nahuel Molina.
Luego, en el segundo tiempo, el "Cuti" Cristian Romero salió reemplazado por un golpe y su lugar lo ocupóGermán Pezzella. En cualquier caso, Argentina sale a jugar con cualquier rival, mostrando autoestima, capacidad de juego y un convencimiento que lo convierte en lo que es: un equipo.
En la eliminatoria sudamericana, Argentina ha ganado los cuatro partidos, ha convertido 7 goles y no le han marcado ninguno. Ya ha sacado cinco puntos de ventaja a quienes vienen por detrás en esta cantidad de presentaciones.
Por eso, vale la pena escuchar a Leo Messi analizando el comportamiento del equipo y lo que le ha permitido desbloquearse después del Mundial para tener el rendimiento superlativo que hoy muestra el seleccionado argentino.
"Crecimos a nivel de juego después de la Copa del Mundo. El equipo se ve con mucha confianza, muy suelto, juegue donde juegue, siempre es protagonista", afirmó el Diez.
Messi había alcanzado el récord máximo de Luis Suárez como goleador de eliminatorias con los dos goles que convirtió ayer. Con 31 goles, Messi se convirtió en el máximo artillero en esta competición.
"La rutina de lo extraordinario", como alguna vez definió Pep Guardiola a todo lo que hace Messi, nos ha acostumbrado a manejar estos números que son de otro planeta con naturalidad. También de Lionel Messi habló Lionel Scaloni, respecto a su condición física, su momento y lo que viene. "Se siente cómodo en el equipo, ojalá juegue hasta donde pueda, porque todo el mundo es feliz viéndolo dentro de la cancha", expresaba el director técnico de la selección.
Argentina sufrió una derrota en los últimos 51 partidos, la cual ocurrió en el partido inaugural de la Copa del Mundo. Además, Emiliano "Dibu" Martínez lleva más de 700 minutos con la valla invicta, quebrando el récord que alguna vez tuvo Germán Burgos.
El último gol en contra se lo marcó Mbappé hace casi un año, en la final que se jugó en Qatar. El equipo nunca más volvió a tener un gol en contra.
Con puntaje perfecto en las eliminatorias y en el horizonte cercano, en noviembre, probablemente los dos rivales más calificados que obligarán al conjunto nacional a elevar el listón hasta lo máximo serán Uruguay, casi confirmado en Córdoba, y luego Brasil en el Maracaná, para cerrar otro año brillante, el año posterior a la Copa del Mundo, el año en el que la selección ha confirmado que además de ser el campeón, es el mejor.
