Nicolás Pino, Presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA) dialogó con Jorge Fontevecchia en Modo Fontevecchia (Radio Perfil FM 101.9 o Net TV) y advirtió que habrá un faltante de fertilizantes y, en consecuencia, menor producción de soja.
¿Crees que puede escalar esta situación de conflicto con el Gobierno, y volver a situaciones parecidas a las del 2008?
Espero que no. Pasaron muchos años, y pasamos muchas circunstancias y realmente volver a una situación así después de 14 años parece lamentable. Tuvimos dos actos muy importantes acá en la Sociedad Rural pero, para mí, la más importante fue reunirnos con aproximadamente 40 representantes de Cámara, de la industria aceitera, exportadores, frigoríficos, y un sin número de representantes para consensuar un documento muy potente, claro y conciso, preocupados por la situación actual de la Argentina. Nosotros queremos colaborar para que el país vuelva a crecer.
¿Hay una oportunidad única para la Argentina para la fabricación de fertilizantes en esta situación mundial?
Yo creo que sí. Hablábamos con un técnico de la Rural de que tenemos la posibilidad de crecer hasta un 40%, y la verdad se determinó otra situación. La palabra aprovechar queda fea, pero nosotros como país productor de alimentos tendríamos que asumir nuestra responsabilidad y producir más.
Pero todo eso se ve limitado porque no están dadas las condiciones, por ejemplo, la falta del gasoil o el doble tipo de cambio que no nos llegue a gastar y quedemos en rojo nosotros. Y esto no se da porque seamos malos produciendo, sino porque la situación es mala. Tan difícil es que probablemente cuando termine la siembra del trigo, estamos sembrando en menos hectáreas que el año pasado.
Soja: mientras toca precio récord, la falta de gasoil complica la cosecha argentina
¿Cómo explicarías esta situación donde el trigo fue el grano que más subió de precio mundialmente y este momento donde se va a plantar menos?
La situación difícil de la macroeconomía del país hace que el productor tome esas medidas. Justamente porque al no tener certezas en un mercado manipulado, el productor siembra hoy pero no sabe en diciembre cuando va a cosechar, o qué es lo que va a pasar con el trigo. Y al poner el precio nos cuestionamos si vamos a poder venderlo o no. Esa incertidumbre en el productor hace que piense qué hacer con su siembra. No nos olvidemos que los insumos, desde la campaña de siembra pasada de trigo a hoy, han subido los costos enormemente.
El fertilizante ahora está bajando, pero en el momento de compra muchos productores hemos pagado hasta 1.400 dólares la tonelada contra 600 del año pasado. Está muy fino el número. Con todos los aumentos de precios, de todas maneras, el número quedó fino y la lluvia nos juega también una mala pasada.
Y en ese número de hectáreas menos respecto del año pasado, ¿ahora en qué ocupa su campo?
Muchos se han decidido por cebada, que es un cultivo con múltiples propósitos también. Algunos lo utilizan para el pastoreo, otros como cultivo de grano para volcárselo al alimento bovino, para el engorde. Y otro punto importante es el no intervencionismo en ese cultivo, porque sino muchos dirían que ante la imposibilidad de sembrar, la falta de lluvias, y otras problemáticas, esas hectáreas se deben destinar a alguien que quizás pueda cultivar soja.
GA PAR