El mundo del fútbol sigue estando atado a cambios teniendo al fútbol femenino como uno de los impulsores para que estos sucedan. De esta manera, en el duelo entre el Benfica y el Sporting de Lisboa, correspondiente a la Copa Portuguesa femenina se dio por primera vez en la historia del fútbol la presencia de la tarjeta blanca en el poder del árbitro. A diferencia de las tarjetas amarilla y roja, la blanca no tiene como objetivo imponer un castigo, sino todo lo contrario.
¿Por qué se exhibió y quién es el beneficiado?
La tarjeta blanca tiene la intención, a través del Plan Nacional Ética en el Deporte, mejorar el valor ético del deporte con el reconocimiento del buen accionar de los protagonistas durante el partido. Es decir, ya sea un jugador como un integrante del cuerpo técnico tenga una actitud de compañerismo, o de “Fair Play” con el rival, este será reconocido con la tarjeta blanca. De esta manera, la tarjeta blanca impone un giro importante en la historia del fútbol desde el arribo de las tarjetas amarilla y roja para imponer un castigo desde el Mundial de 1970.
Con esta nueva implementación, a través del Instituto Portugués del Deporte y Juventud, en Portugal quieren impulsar esta iniciativa hacía el resto del mundo buscando alentar a los deportistas, entrenadores, directivos, público y otros agentes deportivos a actuar de manera “éticamente correcta”, así como también reconocer, resaltar y premiar las actitudes y comportamientos éticamente relevantes en el deporte.
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La primera aparición de la tarjeta blanca se dio entonces en el Estadio Da Luz ante la presencia de 15.032 espectadores, superando los 14.221 en mayo de 2022, lo cual a su vez marcó una cifra récord de presencia en la tren el fútbol femenino en Portugal, en el enfrentamiento entre el Benfica y el Sporting de Lisboa. A través de la jueza del partido, Catarina Branco, la tarjeta blanca tuvo su histórica y primera aparición en un partido luego de que el cuerpo médico de ambos equipos acudiera en conjunto a atender un fanático que se había desvanecido en las tribunas.
En consecuencia, hacía ellos fue presentada la tarjeta blanca para darle pie a la iniciativa del país luso para dar un mensaje positivo y reconocer el “fair play” de los protagonistas. Para respaldar la presencia de la tarjeta blanca, el público soltó una gran ovación seguida de una nerviosa sonrisa del personal del cuerpo médico en cuestión.
Esta nueva norma de la tarjeta blanca, por el momento utilizada solamente en Portugal, trasciende en otros deportes además del fútbol. La entidad encargada de impulsar el uso de la tarjeta blanco aseguró que su uso también se hará presente en partidos de rugby, básquet, vóley, tenis, tenis de mesa, golf, atletismo, entre otros.
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Lo que sí será un verdadero desafío para la federación portuguesa en este caso es que la FIFA impone el uso de la tarjeta blanca en otras competencias. Si bien el máximo ente del fútbol internacional aprobó el uso de la tarjeta blanca en el fútbol aún no es una obligación y lo cual sea poco probable en otras ligas en el corto plazo.
No será la primera vez que aparecen en escena la tarjeta blanca ya que en 2014 Michelle Platini, presidente de la UEFA en aquel entonces, buscó impulsar el uso de esta tarjeta pero con otra intención totalmente diferente a la actual. El dirigente francés promovió la implementación de la tarjeta blanca para expulsar de manera temporal (10 minutos), como ocurre en el rugby en el caso de ver el cartón amarillo, durante los partidos de fútbol por alguna infracción para ayudar con la reducción del uso de tarjetas amarillas.
“La tarjeta blanca reduciría la tensión que provoca el uso de las cartulinas amarillas y rojas durante los partidos”, había afirmado en aquel entonces durante la apertura de la novena edición de la Dubai International Sports Conference.
MVB JL
