Se avecina un 2023 cargado de competencias tanto para River como para Boca que estarán peleando en los mismos frentes: Liga Profesional, Copa Argentina y con especial atención en la Copa Libertadores.
En consecuencia, luego de una extensa pretemporada, ambas instituciones quisieron reforzar sus planteles para poder afrontar de la mejor manera cada uno de los compromisos que tendrán en un cargado calendario. En líneas generales, River que cuenta con Martín Demichelis, una cara nueva tras la partida de Marcelo Gallardo, se encargó de sumar algunos rostros conocidos al plantel y también sellar la llegada de nuevos aires para enriquecer un plantel que promete competir.
Por su parte, Boca se mantuvo un poco más al margen en un mercado que se torna cada vez más complicado desde lo económico. Cerró una cara nueva por emergencia y busca reforzar otros sectores, además trajo de vuelta juveniles que cedió para fogonear y tener listo para sumarse al plantel.
Desde la partida de Marcelo Gallardo, el entrenador más ganador en la historia del club, todo era incertidumbre en Núñez. Para despejar todo tipo de dudas, la dirigencia encabezada por Jorge Brito tomó muy buenas decisiones de cara a una nueva temporada post Muñeco Gallardo.
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Primero que nada, cerró el arribo de Martín Demichelis, alguien que conoce el club a la perfección y que además mostró las credenciales necesarias para ponerse el saco de DT en River luego de su experiencia en el segundo equipo del Bayern Múnich junto con una extensa preparación en el fútbol europeo. Así, el primer arribo importante en River llegó en el entrenador que ya viene imprimiendo cuotas de la identidad que quiere ver en sus equipos.
Junto con el arribo de “Micho”, se dieron los regresos de otros viejos conocidos de la casa. El primero de ellos fue Matías Kranevitter, proveniente del Monterrey de México. El tucumano llegaba para nutrir el mediocampo millonario, pero luego de su lesión el primer partido de pretemporada ante Unión La Calera sufrió una dura lesión que lo mantendrá marginado por un tiempo considerable. Otra figura estelar que volvió a Núñez fue Nacho Fernández tras su paso por el Atlético Mineiro. Un tercer refuerzo fue Enzo Díaz proveniente de Talleres.
Ahora bien, lejos de bajarse del mercado, desde el Millonario cerraron otra transferencia de jerarquía. Si bien es un puesto que tiene cubierto con las presencias de Lucas Beltrán y Miguel Ángel Borja, River cerró la llegada de Salomón Rondón, el experimentado centro delantero venezolano. La espera llegó a su fin y el delantero de 33 años arribó al país el domingo, firmó su contrato y ya se encuentra entrenando con el plantel, donde ya dio muestras de su jerarquía a la hora de trabajar la definición.
Rondón que supo compartir plantel con Martín Demichelis en Málaga allá por 2009, cerró su vínculo con el conjunto de Núñez hasta diciembre de 2024 con la opción de extenderlo por un año más. Si bien se trata de un jugador sumamente interesante desde lo futbolístico, Demichelis debe recuperar su mejor versión ya que Rondón tuvo su último partido el 15 de octubre de 2022 con la camiseta del Everton ante Tottenham por la Premier League inglesa. Llega bien desde lo físico, pero hay que afinar desde lo futbolístico. Así River cerró un gran mercado de pases para afrontar un 2023 desbordado de compromisos.
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En Boca el mercado de pases no tuvo tanto movimiento como en Núñez. La postura del club fue bancar al plantel que había, respaldar a los jugadores e intentar traer alguna cara nueva de jerarquía para algunos sectores puntuales que se vieron afectados por lesiones. Uno de los sectores más tocados en Boca es la zaga central. Sumada a la lesión de su capitán Marcos Rojo, que estará alejado de las canchas hasta mediados de la temporada por una lesión ligamentaria, también se vio la salida de Carlos Zambrano por una situación extra futbolística.
Esos dos casos empezaron a generar la necesidad de salir al mercado a buscar un central. La lesión, momentánea, de Nicolás Figal hizo que esta búsqueda se acelere. Así se dio el arribo de Bruno Valdez, proveniente del América de México donde fue una pieza clave durante años, siendo unos de los defensores goleadores vistiendo esa camiseta. El primer y único, refuerzo del Xeneize es entonces el defensor central paraguayo que ya tuvo su presentación oficial en la Bombonera y dejó buenas sensaciones.
Si bien no es un refuerzo concretamente, la vuelta de Ezequiel "Equi" Fernández se vio con muy buenos ojos. En el Matador, el volante central sumó minutos y roce en primera, algo que en Boca querían darle en otro club ante un mediocampo afianzado para la visión del cuerpo técnico en el primer plantel. Mostrando una gran versión, el volante de 20 años volvió al club para ser el recambio de Alán Varela. Esa situación puede llegar a cambiar ya que el cinco xeneize está en carpeta del Benfica en caso de que se de la salida de Enzo Fernández al Chelsea. Ahí, "Equi" tomaría la posta para entrar en el once.
Ahora bien, Boca hizo sondeos para traer otras caras nuevas. Uno de los apuntados fue Lucas Merolla, defensor de Huracán. Si bien el club presidido por Ameal hizo una propuesta formal por el jugador, desde Parque Patricios se dio un no rotundo, ya que entendían que la propuesta de Boca no se acercaba a las expectativas económicas del Globo por la venta de una de sus mejores apariciones en la última temporada. Una situación similar se dio con Independiente en el afán de Boca en llevarse a Sergio Barreto, una negociación que parece caída.
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Para darle mayor ilusión al hincha, desde el club de la Ribera confirmaron las conversaciones por el arribo de Miguel Merentiel, actual delantero del Palmeiras. Si bien Boca tendría cubierto ese sector del terreno de juego, traer más competencia y jerarquía puede enriquecer el frente de ataque. A su vez, Darío Benedetto está suspendido (le restan cumplir tres fechas), Luis Vásquez está lesionado, siendo entonces Nicolás Orsini la única opción para Hugo Ibarra. Este último no es del gusto del hincha, hasta el momento, por lo realizado por el ex Lanús que tuvo una buena presentación el pasado domingo. Con este panorama, traer un delantero más tendría el visto bueno del Consejo de Fútbol.
Respecto a Merentiel, es un delantero que sabe lo que es jugar en primera, salir campeón de manera internacional incluso y a sus 26 años busca nuevos rumbos ya que corre de atrás en el Palmeiras. El ex Defensa y Justica partió al fútbol brasileño a mediados de 2022, luego de consagrarse en la Copa y Recopa Sudamericana con el Halcón de Varela por la suma de 1.500.000 de dólares por el 80% de su ficha. Si bien llegaba con un refuerzo de jerarquía no vio el rodaje pensado. Entre 2022 y 2023 solo jugó diez partidos anotando dos goles, ante Santos y Bragantino. Incluso de lo que va de la actual temporada solo disputó tres minutos el pasado miércoles ante Ituano por la Copa Paulista. Con este panorama desde el entorno del futbolista aseguran que la interesa llegar a Boca a esta altura de su carrera.
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De esta manera, el 9 que también sonó en River en 2021 tiene 26 años y jugó en varios equipos a lo largo de su carrera. Debutó en El Tanque Sisley de su país en 2017, y pasó por el Lorca y el Valencia II del Ascenso de España y en 2018 recaló en Godoy Cruz, donde le fue muy bien. Fue campeón con Defensa y pegó el salto a la liga brasileña, aunque le costó consolidarse en un equipo de estrellas. En Boca son entusiastas en que la llegada del delantero de 26 años se dará en el correr de estos días en condición de préstamo. El arribo de Merentiel podría cerrar un mercado de pases calmo para el Xeneize, que supo mantener una estructura, para traerle mayor jerarquía al frente de ataque y ver si despierta a Benedetto con más competencia en el plantel.
MVB FM
