En un hangar a un kilómetro de Arcore, conserva 24.000 cuadros de pintores como Tiziano, entre otros artistas.
Se trata de la colección privada de Silvio Berlusconi, quien gastó cerca de tres millones de euros en arte a través de subastas televisivas de obras de arte.
Su testamento se abrirá a finales de este mes de junio, pero es una incógnita cómo repartirá su patrimonio. Tras la muerte del ex primer ministro, una de las grandes incógnitas por resolver es la de a quién irá a parar su patrimonio artístico.
El fundador de la nueva centroderecha italiana
Está previsto que el testamento se abra a finales de junio o comienzos de julio. Famoso por sus escándalos, procesos judiciales –condenado por fraude fiscal en 2012 y absuelto de tantos otros– y fiestas bunga bunga en las que ha sido acusado de promover prostitución de menores, el de coleccionista de arte es una faceta desconocida del fundador de Mediaset.
Tras la muerte de Berlusconi, el también alcalde de Arpino –quien prometió la primera plaza dedicada al político en esta ciudad del Lazio– revela algunos detalles de su colección de arte.
El ex primer ministro comenzó a coleccionar cuadros en una primera pinacoteca luego de comprar su residencia en Arpino. Llegan obras de Giampietrino y Procaccini. En su colección también se encuentra un cuadro de Pietro della Vecchia, un importante pintor del 1600 de la región del Veneto influenciado por Tiziano y Caravaggio.
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Cuadros de carácter no religioso, cuadros que pertenecen al ottocento italiano y de pintores como Ugo Celada da Virgilio, uno de los mayores exponentes de la pintura figurativa y precisionismo –realismo cubista–. También obras que Berlusconi fue adquiriendo principalmente de muestras de anticuario.
También hay obras que fue recibiendo de personas que lo admiraban, fundamentalmente cuadros de arte moderno. Entre ellas también el retrato que le hizo Rinaldo Geleng, que ha retratado entre otros a Sofia Loren o el Papa Juan Pablo II.
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Entre las joyas de la corona del patrimonio artístico de Berlusconi se encuentran una copia de Antea, joven dama pintada por el artista italiano Francesco Mazzola –conocido como Parmigianino– alrededor de 1535. La obra original se encuentra en el Museo de Capodimonte de Nápoles. Una versión desnuda de la Mona Lisa.
Este cuadro es de atribución incierta, aunque ha generado expectación y ha dividido a los expertos. Hay quienes lo consideran obra del mismísimo Leonardo y quienes creen que es una obra de algún artista formado en el taller del maestro.
FM JL
