Una parada obligatoria. Fito Páez llegó a Nueva York para festejar los 30 años de "El Amor después del Amor" en el Radio City Music Hall de Manhattan. En un concierto de más de dos horas, el rosarino repasó el disco que festeja y tocó clásicos para todos los gustos.
Este show contó con la particularidad de dos invitados de lujo, el cantautor británico, Elvis Costello y el rosarino Cesar Debernardi, amigo de Páez. El primero cantó en Yo vengo a ofrecer mi corazón en un español con mucha voluntad que el inglés se esforzó en empeñar para cantar el tema. Páez lo presentó como un amigo al que antes de conocerlo lo consideraba un “héroe”. Y habló de la dificultad de conocer a tus ídolos. Para darle esta presentación, el rosarino habló en inglés, algo difícil de entender para los neoyorquinos que estaban en la sala. En la noche del domingo, también hubo un momento para saludar a John Lennon, que este 9 de octubre se cumplieron 82 años de su nacimiento.
La noche empezó a las 20.30, media hora después de lo pautado. Al igual que en Buenos Aires, el rosarino tocó los 14 temas del disco que celebra de corrido. A Tumbas de la Gloria lo destacó como el tema que marca un punto de inflexión en el disco y recordó cuando lo compuso con una guitarra de dos cuerdas en Europa. La ovación llegó cuando destacó a Luis Alberto Spinetta como uno de los compositores de Pétalo de Sal. Con Brillante sobre el Mic se pagaron las luces del teatro, y los celulares hicieron lo suyo con las linternas.
Con la elegancia que lo caracteriza, Páez se molestó porque prendieron el aire acondicionado del lugar. Al principio, intentó taparse el pecho con su camisa que estaba desabrochada en el primer botón. Después empezó con el resto de la bufanda, hasta que le alcanzaron desde el staff una bufanda que terminó usando para revolear al grito de "A rodar de mi vida".
Todo esto lo veían alrededor de cinco mil personas de todo el mundo que coparon el teatro emblema del art decó neoyorquino de la década del 30. El Radio City Music Hall es una pieza arquitectónica de Edward Durell Stoll que tiene 5.931 asientos. Desde ahí llegaron argentinos, uruguayos, venezolanos, paraguayos, entre otros nacidos en Latinoamérica, y neoyorkinos escucharon al cantante de Rosario.
Fito Páez inició gira récord por los 30 años de ‘El amor después del amor’
Una mujer argentina de unos 50 años llevó a su hija y a su pareja, “El Gringo”, a ver el show. “Me fui de Argentina hace 30 años y vinimos de Chicago hasta acá para escucharlo”, contó. Así fue que cantaron madre e hija (que no es argentina, pero sabía los temas de escuchar a su mamá) durante todo el show, de los más esperados.
Con un intervalo de diez minutos Páez renovó las energías para salir a tocar lo mejor de su etapa posterior a El Amor después del Amor. Empezó con El Diablo de tu Corazón, pero en este momento aparecieron temas como Circo Beat, 11 y 6, Al lado del Camino. Con el objetivo de volver a tocar el disco más vendido de la historia del rock nacional ya cumplido, Páez empezó a jugar con el público. “Quiero ver sangre en el publico”, dijo para alentar que la gente cante. Además, dividió al público en Circo Beat para que un sector cate y otro haga los coros del estribillo.
La gira sigue el 13 de octubre en Caracas, Venezuela y luego cruza el Océano Atlántico para tocar el 25 y 29 del mismo mes en Madrid y Barcelona.