OPINIóN
21 de mayo, Día Mundial de la Meditación

Un camino posible hacia la felicidad

Meditar puede cambiar la mente y los pensamientos, la manera de percibir la realidad; por eso impacta sobre el bienestar. Hay que reeducar a la mente a pensar de una forma positiva y compasiva

Meditación
Liderá tu vida: la importancia de la salud mental en la vida diaria. | Pexels

La meditación es la disciplina, herramienta, estilo de vida, y/o filosofía por excelencia con más evidencia científica en cuanto a los beneficios que tiene tanto para la salud física como mental. Efectivamente, meditar puede cambiar tu cerebro, tu mente, tus pensamientos, tu forma de percibir tu realidad y en consecuencia tu vida en general.

Según Nazareth Castellano, neurocientífica española, lo que más estrés nos genera a las personas es estar haciendo una cosa y al mismo tiempo estar pensando en veinte cosas más. Ella cuenta que con el afán de comprender cómo funciona la mente humana desde la neurociencia, se realizó un estudio en la Universidad de Harvard, publicado en la Revista Science. 

En él se tomó a un grupo de personas y se los puso en una sala sin distractores para ver donde iban sus pensamientos voluntariamente y si podían controlar sus mentes. Los resultados indicaron que el 83% de las personas tuvieron pensamientos muy desagradables y no lograron estar concentrados más de 6 minutos. Esto indica que la gente no sabe estar en el presente. La mente por defecto divaga y va a lugares negativos y oscuros de los cuales luego les cuesta salir. Hay que reeducar a la mente a pensar de una forma positiva y compasiva. 

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Meditar es más fácil de lo que parece

Muchas veces nos resistimos al cambio y a la posibilidad de estar mejor. Nos quedamos en la confortable incomodidad, la que nos es familiar y no nos demanda esfuerzo ni tiempo, pero si nos quita la posibilidad de conocer otra realidad que la que estamos habituados. Así, perdemos la gran oportunidad de disfrutar y ser felices.

Si bien muchos piensan que meditar es algo que está de moda en Oriente, sus beneficios se han estudiado y comprobado a lo largo de toda la historia. La práctica se centra en tomar control de nuestra propia mente adiestrándola a pensar del modo correcto; positivo; compasivo con nosotros mismos y el entorno; y de un modo bonito y amoroso. La realidad al final no es otra que aquello que nosotros pensamos qué es; y a lo que le presto atención.

V

¿Cómo lograrlo? Habituando nuestra mente a través de la meditación y la respiración a estar en el presente y hacer foco en cosas que dan felicidad. De este modo se entrena para que el cerebro quede en calma estando en un único lugar por varios minutos; esto es la atención plena ubicada en la corteza prefrontal del cerebro y que además comience a internalizar las cosas bonitas que me repito a diario. Cuando la atención plena se fortalece, cambia la mente, se abren los sentidos y cambia la percepción de las cosas. 

De pronto poder apreciar y conectarte con los aspectos más hermosos de la vida se vuelve algo cotidiano ya que muchas cosas del plano inconsciente pasan al consciente y la mente logra conectar con lo más milagroso de modo automático.

Los beneficios que se obtienen al meditar de 20 a 30 minutos diarios serán cambios significativo para la vida: disminuirá la rumiación mental y estrés; permitirá relajarse más fácilmente; ayudará a lograr el equilibrio del sistema endocrino/inmunológico; reducirá los síntomas asociados a la depresión, trastornos de ansiedad y dolor crónico. Ayudará a prestar atención y vivir en el tiempo presente mucho más feliz y conectado con tu realidad.

La gente no sabe estar en el presente. La mente por defecto divaga y va a lugares negativos y oscuros de los cuales luego les cuesta salir"

Hay herramientas personales que dan la posibilidad de construir el presente con disfrute, paz y amor. 

La autoconciencia o autoconocimiento: Consiste en la capacidad de conectarse con uno mismo, explorar los miedos, debilidades y fortalezas, y aprender de ello. Así, es posible centrarse en lo que podemos hacer y entender qué es lo que nos detiene. Esta habilidad de conexión interna nos permite trazar nuestro camino, superarnos y encontrar la paz interior. Propongo reflexionar y poner en palabras lo que pensamos de nosotros y llevar un registro de ello. Abrazar nuestras experiencias y trabajar con cuadernos de escritura y meditación nos va a ayudar a desarrollar la autoconciencia.

El amor propio: Implica cultivar una relación afectuosa con nosotros, practicar la auto aceptación, la tolerancia y mirarnos de manera compasiva. Debemos prestar atención a cómo nos hablamos, tanto en momentos de éxito como en situaciones desafiantes, y trabajar en fortalecer un vínculo sano. Propongo hacer una lista de nuestras cualidades y practicar meditaciones de apreciación que posibiliten la conexión con aspectos beneficiosos de nuestro ser interior.  

Meditaciones de apreciación: Está comprobado científicamente que la práctica repetitiva de la meditación ayuda a mantener la concentración en el ahora y reducir los pensamientos negativos. Ser conscientes del presente disminuye la ansiedad y la autocrítica, y nos hace ver el mundo de un modo más positivo. Es ideal meditar de forma rutinaria para entrenar la mente y generar serotonina, lo que nos lleva a una felicidad duradera. Sugiero combinar la meditación con respiraciones profundas y diafragmáticas para mejorar la concentración.

Agradecimiento: Agradecer diariamente las cosas buenas que nos suceden nos brinda satisfacción y bienestar. Al apreciar lo que tenemos, cultivamos un pensamiento optimista y una visión más armoniosa de la vida. Sugiero llevar un registro periódico de agradecimientos y conectar con ellos a través de la meditación. También se pueden direccionar nuestros pensamientos de modo tal que se enlacen con tal intención. Al convertir esto en una rutina, construimos una mente más positiva.  

Respiraciones diafragmáticas: Inhalar por la nariz y expandir el abdomen durante 4 segundos, luego exhalar por la boca o la nariz y contraer el abdomen durante 6 segundos. Repetir de 8 a 10 veces, o más si es necesario, hasta sentirse más relajado. Esto ayuda a calmar la mente, reducir la frecuencia cardíaca y las pulsaciones y promover estados de placer y calma duraderos. Se puede utilizar como herramienta para conciliar el sueño. 

*Coach de salud y bienestar