El enorme crecimiento del distrito de Bal Harbour ya no puede calificarse como una moda. Hace rato que las ofertas gastronómicas, hoteleras y comerciales de la localidad que goza de dos kilómetros de playa en Miami ofrecen una renovación constante, y siempre con su insignia principal: el lujo.
Bal Harbour Shops quizá es la representación más significativa de la sutuosidad y la exclusividad del distrito. El shopping tiene 100 locales boutiques de las marcas más importantes del mundo de la moda como Prada, Fendi, Valentino, Bvlgary, Armani, Dolce & Gabbana, entre otros, que muestran sus colecciones más fuertes.
Quienes lo visiten esta temporada se encontrarán con la incorporación de nuevas marcas como Santoni, Aquazzura, Phillip Lim, Gianvito Rossi, Iro, Diptyque & Moncler. Y también podrán apreciar la expansión del nuevo local de Harry Winston y de Ferragamo.
Su gran escena gastronómica. "Pero no somos sólo un shopping", explicó a PERFIL Gotmar Giron, directora de relaciones públicas del mall. "Tenemos una gran variedad de comidas en nuestros seis restaurantes. La gente también viene a disfrutar de la mejor calidad gastronómica aquí", precisó.
Incluso uno de sus restaurantes, Le Zoo, de la brasserie francesa de Stephen Star, ha sido seleccionada para la 16° edición del Miami Spice, un evento que convocó a los principales restaurantes de Miami y a los chefs más reconocidos, para la promoción de su cocina a un precio muy accesible.
Para los amantes de la cocina italiana, Carpaccio es el lugar que no pueden perderse. Es el restaurante italiano más frecuentado por el público local y el turismo internacional. Su ubicación en la entrada de Bal Harbour Shops le ha valido ganarse fama mundial entre socialités y celebridades. Porsches, Ferraris, Bentleys, Kim Kardashian, Justin Timberlake, Jennifer Lopéz, todos pueden encontrarse allí. Lo interesante es que sus precios son absolutamente moderados.
Proyecto de ampliación. A 50 años de su inauguración, Bal Harbour Village aprobó la remodelación del shopping que implicará una inversión de 400 millones de dólares para duplicar su espacio.
"Serán tres fases y comenzarán el año que viene, aunque no se sabe con exactitud la fecha aún", detalló Giron, y aseguró que llevará entre "seis y ocho años".
La ampliación sumará 31,622 metros cuadrados, en nuevos locales y espacios de paseo a cielo abierto, duplicando la cantidad de locales que posee actualmente. Anticipan la llegada de el primer Barneys New York, mejoras notables en la tienda de Neiman Marcus, la primera departamental en llegar a Bal Harbour shops, nuevos restaurantes, incluyendo Freds en Barneys.
La decoración tropical tan emblemática del mall se verá mejorada y una nueva plaza recibirá a las visitas en el ingreso principal del Mall sobre la Avenida Collins.
"Estamos muy entusiasmados con este proyecto e inversión ya que debemos asegurarnos el futuro de los Shops como líder global en el negocio de las compras de lujo, visión que tuvo mi abuelo, Stanley Whitman, cuando desarrolló este negocio en 1960", comentó Matthew Whitman Lazenby, Presidente y CEO de Whitman Family Development, la empresa familiar propietaria y operadora de Bal Harbour Shops.