El caso de Pablo Cuchán debe ser uno de los casos policiales más escalofriantes de los últimos tiempos en la Argentina. Tristemente célebre por haber asesinado, descuartizado y quemado en una parrilla a su novia Luciana Moretti, de 15 años, crimen por el que fue condenado a 17 años de prisión y por el que estaba en libertad condicional, ahora se supo que tuvo otra detención, acusado de haber golpeado y tomado del cuello a una mujer que lo acompañaba en su auto. También chocó a propósito el vehículo contra un árbol. Sin embargo, las autoridades judiciales de la fiscalía de Bahía Blanca entendieron que había contradicciones entre el acta de procedimiento y las acusaciones de la víctima, y lo liberaron.
“Cuchán está libre porque lo que declaró la víctima, contradice lo que refería al acta de procedimiento por el cual se lo aprehendió”, señaló el jefe de Fiscales de Bahía Blanca, Juan Pablo Fernández, según publica TN.
"En un principio, la joven había manifestado que el hombre la intentó ahorcar, que no la dejaba bajar del auto y que por eso debió arrojarse del vehículo. Luego, tras tomar declaración, la víctima dijo que no fue así y que solo se asustó cuando él la tomó del cuello y la intentó besar", aseguró.
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El incidente sucedió el sábado 20 de abril, en Bahía Blanca. La mujer de 27 años se tiró del vehículo en marcha. El acusado no hizo caso a la voz de alto de la policía del lugar, y tomó la decisión de estrellar su auto contra un árbol y tratar de escapar a pie.
Finalmente, fue capturado por efectivos de la comisaría 1° y del Comando Patrulla. Debido a que se negó a hacer el test de alcoholemia y de drogas, fue trasladado a una dependencia policial. Según comentaron las autoridades, el detenido y la víctima habían estado bebiendo cerveza y los testigos del operativo entendieron que el acusado tenía signos de un estado de ebriedad.
Sin embargo, la fiscal Claudia Lozano explicó a radio La Brújula 24, que “consideré la inexistencia de figura delictiva. Le di intervención al Tribunal Criminal N°1 y al Juzgado Correccional en turno, a fin de que valore la existencia de alguna falta o contravención".
El hombre fue condenado a 18 años por el crimen de Luciana. Tiempo después, le redujeron un año la pena y en 2013 la Suprema Corte provincial dispuso la nulidad parcial de la condena por considerar que se incurrió en una doble valoración de un agravante y ordenó que se dicte una nueva sentencia con otra pena.
Pablo Cuchán había confesado que no supo qué hacer con el cuerpo de su novia y decidió quemarla en la parrilla de su casa. Fue el 16 de octubre de 2004 en Ingeniero White, cuando su pareja tenía apenas 15 años. Durante el juicio, el acusado explicó que la chica había muerto por sobredosis de cocaína, la llevó hasta la parrilla y la prendió fuego con solvente y leña.
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Cuando lo condenaron, pidió perdón a sus padres y hermana, a la familia de Luciana y a todos los que confiaban en él. Hace un tiempo, ya en libertad, Cuchán había publicado su perfil en Tinder, una red social para buscar pareja.
Si sos víctima de violencia de género comunicate con el 144, una línea gratuita que funciona en todo el país, las 24 horas, los 365 días del año.
CP/EA