“Es una pena de por vida”. Así lo anunció la fiscal Verónica Ferrero tras escuchar que el Tribunal de Audiencia de Santa Rosa, en La Pampa, condenó a prisión perpetua a la madre de Lucio Dupuy (5) y a su novia por haberlo asesinado a golpes y por abuso sexual. Los acusadores habían solicitado que se le agregara la accesoria de “tiempo indeterminado” a la pena máxima, pero los magistrados no hicieron lugar. En la práctica, aclaró la representante del Ministerio Público Fiscal, no es un cambio sustancial en la condena final porque por la calificación del delito que les atribuyeron a Magdalena Espósito Valenti (25) y a Abigail Páez (28) “no podrán” acceder a la libertad condicional. “Es perpetua literal”, destacó el abogado de la familia paterna del menor.
“En el parágrafo 21, el Tribunal que las condenó dice expresamente: ‘Nunca el condenado a prisión perpetua por el homicidio agravado agotará su cumplimiento’”, leyó al comienzo de la conferencia de prensa el abogado de la familia paterna de Lucio, José Aguerrido. “O sea (esto es), perpetua literal”, resaltó y aclaró que, tras la lectura del tribunal, la sensación fue, en un principio, “de disgusto” porque no habían dado lugar al pedido de la accesoria de “tiempo indeterminado” a la condena a perpetua, pero tras leer la resolución de los jueces quedaron conformes.
“Hoy por hoy, como está la legislación argentina, la condena es perpetua, y entiéndase eso literalmente: no salen más”, precisó Aguerrido. “Al principio hubo un descontento pero se logró lo que mi abogado pidió”, sostuvo Ramón, el abuelo de Lucio. En este sentido, el letrado completó que “salí con un dejo de desasosiego, pero después tomé lectura y llamé a Ramón para decirle: ‘Misión cumplida, perpetua es perpetua’”.
Espósito Valenti había sido encontrada culpable el pasado 2 de febrero por el delito de “homicidio triplemente calificado por el ensañamiento, por la alevosía y por el vínculo”. Mientras que Páez fue condenada por “homicidio por ensañamiento y alevosía” y por “abuso sexual gravemente ultrajante”. Y ayer, como última instancia de este juicio, el tribunal dio a conocer el monto de la pena. Ambas acusadas decidieron no presenciarlo, como cuando se dio a conocer que las encontraban responsables del crimen de Lucio, ocurrido en noviembre de 2021.
Por su parte, la fiscal Verónica Ferrero explicó a la prensa tras la lectura de la imposición de pena que “fiscalía y querella habían pedido también la imposición del artículo 52, que es la accesoria por tiempo indeterminado, pero lo que tienen que saber es que esta prisión perpetua que acaban de disponer los jueces es una pena de por vida; no tienen posibilidad de salir en libertad”.
“Hay delitos que son muy graves, como el que cometieron las imputadas, por el cual no se otorga la libertad condicional”, precisó y, en este sentido, agregó: “El artículo 14 del Código Penal establece que las personas que son condenadas por este delito no pueden pedir, transcurridos los 35 años, ni ningún término, la libertad condicional”.
Por otro lado, tanto la querella como la fiscalía anunciaron que van a apelar la decisión de excluir a la madre de Lucio del delito de abuso sexual. Los jueces se lo atribuyeron solo a Páez. Y el padre de la víctima insistirá con que se trató de un crimen con el agravante de “odio de género”.
En la actualidad, ambas mujeres están alojadas en un penal de San Luis y la familia paterna del nene pedirá que sean separadas cuando se defina dónde deberán cumplir su condena.
El hecho. “Es posible afirmar, con certeza que reclama una sentencia judicial, que Lucio Dupuy fue objeto de violencia física, psicológica y sexual durante varios meses antes de su muerte”, sostuvieron los magistrados en su fallo dado a conocer a principio de febrero. Según se reconstruyó, el crimen ocurrió el 26 de noviembre de 2021. Esa noche, Lucio fue llevado por Páez al hospital donde se constató que había muerto. Allí dijo que el nene se había quedado solo un rato y cuando volvió encontró la casa revuelta, al menor herido, y que habían abusado de él. Era todo mentira. La autopsia precisó que los golpes mortales se produjeron entre las 18 y las 19, cuando ambas mujeres estaban en la casa. Luego, Espósito Valenti y Páez salen de la propiedad rumbo al trabajo de la madre del nene. Después de las 21, la pareja de la madre de Lucio regresa a la casa, y una cámara de seguridad registra cuando sale con el nene en brazos, desvanecido.
Los enfermeros y médicos que recibieron a Lucio confirmaron que ingresó sin vida y describieron un cuadro desgarrador en el cuerpo del nene. El informe de autopsia revela lesiones de vieja data y de ese mismo día. Múltiples, brutales, salvajes, tanto visibles como internas. Luego los chats entre ellas revelarían el constante maltrato y golpes a los que sometían al nene. Ahora sus asesinas recibieron una condena a perpetua.
El destino de las acusadas
“Por ahora van a quedar alojadas donde están, y posteriormente será disposición y decisión del Sistema Penitenciario Federal si van a quedar juntas o serán separadas. No es una decisión que tomen la fiscalía o los jueces”. Así lo explicó la fiscal del caso con respecto al reclamo, desde un principio, que realizó la familia paterna de Lucio Dupuy de que Magdalena Espósito Valenti y Abigail Páez sean separadas. Ambas están detenidas, en el Complejo Penitenciario 1 de San Luis. Allí fueron llevadas al comienzo del caso, luego de que se produjera una manifestación con incidentes en la Comisaría 6a, donde habían sido alojadas tras conocerse la pena, no se sabe dónde quedarán alojadas ni si se escuchará el pedido de la familia de Lucio. La Pampa no cuenta con Servicio Penitenciario provincial. Tiene una cárcel para mujeres que pertenece al Servicio Penitenciario Federal, la Unidad 13. Allí hay 36 mujeres detenidas con condena (otras dos están en comisaría), según el último informe del Sistema Nacional de Estadísticas sobre Ejecución de la Pena correspondiente a 2021. Y tres de ellas, por homicidio, como Espósito y Páez.