La Cámara de Apelaciones de Lomas de Zamora confirmó la condena a dos años y un mes de prisión condicional para el futbolista colombiano que jugó en Boca Juniors, Sebastián Villa, por violencia de género contra su expareja Daniela Cortés, en abril de 2020.
Lo ratificó la sala segunda de la Cámara de Apelación y Garantías en lo Penal Departamental de Lomas de Zamora, bajo la firma de los camaristas Pablo Little y Alejandro Rojas. Ambos avalaron el fallo dictado en junio de este año por la jueza Correccional 2 de Lomas de Zamora, Claudia Dávalos.
En paralelo, Villa también espera que se lleva a cabo otro juicio en el que se encuentra imputado por presunto abuso sexual de una joven de 26 años, hecho que ocurrió en junio de 2021 en un country de la localidad bonaerense de Canning, según detallaron fuentes judiciales.
Sebastián Villa: los hechos
De acuerdo a la reconstrucción que hizo la fiscalía, la agresión ocurrió el 27 de abril del 2020 en una casas del country Saint Thomas de Canning cuando Villa le dijo a Cortés que arruinaría su vida y la golpeó en la frente con un puñetazo. Luego la habría arrojado al piso y le habría propinado patadas que le produjeron “distintas lesiones de carácter leve”.
El abogado de Villa, Martín Apolo, insistió durante el juicio en que esa agresión no estaba probada e incluso sostuvo que era la mujer quien lo golpeaba.
La denuncia de Cortés fue realizada, en un principio, en una publicación en redes sociales donde se la veía con sangre en la boca. Allí relató distintos maltratos que el jugador le habría infligido.
La condena
El viernes 2 de junio de 2023 Sebastián Villa escuchó la decisión de la justicia en el caso que lo tenía como acusado de haber golpeado a su ex pareja Daniela Cortés en abril del 2020. Ese día lo condenaron a dos años y un mes de prisión condicional por los delitos de lesiones leves agravadas por el vínculo, violencia de género y amenazas coactivas.
Además, le impusieron una serie de condicionalidades, entre ellas la prohibición para consumir estupefacientes y alcohol en exceso; un tratamiento psicosocial y la participación en talleres "a los fines de abordar su problemática".
Fue obligado a no tener ningún tipo de contacto con Daniela Cortés ni su familia, a quienes según el relatoi de la mujer había amenazado.
LT