La suerte del empresario Enrique Blaksley cambió hoy cuando fue detenido en su casa del Pacheco Golf Club. Fue por orden de la juez Federal María Servini, quien hizo lugar a un pedido de la fiscal del caso, Alejandra Mángano, en el marco de la investigación por las estafas presuntamente cometidas por Blaksley, conocido como el “Madoff argentino”, a través de la firma Hope Funds. Durante esta mañana también fue detenido su socio Alejandro Carozzino, en tanto que la justicia busca a una mujer y un hombre, cuñados de Blaksley, que no fueron encontrados en los allanamientos a sus domicilios. En tanto que otras 14 personas fueron citadas a indagatoria.
A todos se les imputado el haber formado parte de una organización, liderada por Blaksley, destinada a captar sumas millonarias de dinero de distintos ahorristas o inversores.
La captación del dinero se hacía a través de la suscripción de contratos de mutuo y contratos de inversión, ofreciendo para ello tasas muy superiores a las del mercado. La clave para atraer a los ahorristas era desplegando actividades engañosas con las que se demostraba solidez y hasta se recurría al sponsoreo de eventos artísticos o deportivos de primera línea.
Blaksley es investigado en un complejo expediente desde hace más de un año, pero fue desde fines del año pasado a esta parte que las autoridades detectaron “maniobras de elusión, llevando dinero al exterior o instalándola en instituciones”, según confirmaron fuentes judiciales a PERFIL. Para las autoridades, hubo entorpecimiento de la investigación y por eso ordenaron las detenciones.
Junto a las detenciones también se ordenaron 40 allanamientos entre domicilios de la ciudad de Buenos Aires, San Isidro, Pilar y La Plata. Entre las propiedades allanadas hay domicilios particulares, sedes de empresas e instituciones.
También se dictaron numerosos embargos, congelamientos de cuentas bancarias, inhibición general de bienes y se solicitó un informe detallado a UIF sobre las empresas que conforman el grupo Hope Funds SA.
También se ordenó la intervención de las empresas pertenecientes a Blaksley y en las que tiene participación y se pidió que la intervención esté a cargo de AFIP y los veedores sean funcionarios de ese organismo.
La dinámica de Hope Funds
Blaksley fue el cerebro detrás de Hope Funds, la empresa a través de la cual se conseguían las inversiones de los ahorristas, a quienes ofrecían tasas muy superiores a las del mercado. Para atraerlos se desplegaban las actividades engañosas, que consistían en diversas participaciones en emprendimientos y marcas de renombre. Entre esas maniobras estuvo la campaña de marketing para la cual se desembolsaron gastos millonarios a fin de que Hope Funds fuera sponsor de distintos eventos como el partido entre Roger Federer y Juan Martín del Potro.
Eso generaba confianza en los ahorristas que depositaban sus fondos en las empresas vinculadas a él y su grupo.
Para la justicia, “así, al menos, se han podido captar fondos por $550.678.556,66 sin la intención de restituirlos a los inversores ni de aplicarlos a inversiones consistentes con los plazos de devolución allí dispuestos”.
De acuerdo a fuentes judiciales, para el desvío de fondos se utilizó un complejo entramado societario. El grupo conformó más de 25 empresas en el país y muchas de ellas eran utilizadas únicamente para canalizar los flujos dinerarios, mientras que otras tenían actividad .