“Estaba pescando en Monte Hermoso”. Eso argumentó cuando se entregó ante la Justicia el hombre que llevaba 24 horas prófugo. Pablo Víctor Cuchán (40) está cumpliendo una condena por haber descuartizado a su novia de 15 años en 2004 pero gozaba de libertad condicional. En lo últimos días habían solicitado su detención por violar los requisitos para mantener ese beneficio.
Tranquilo y con un bolso deportivo, llegó hasta los tribunales de Bahía Blanca. Lo acompañaba su abogado, Maximiliano De Mira. “Estaba pescando en Monte Hermoso, vivo ahí y no tengo arresto domiciliario”, le dijo al sitio La Brújula24 cuando se entregaba a la Justicia. Ahora podrá recuperar la libertad en unos tres años, con el cumplimiento total de la condena sin beneficios.
El femicida gozaba de libertad condicional, pero la última semana protagonizó dos hechos que lo llevaron de regreso a la cárcel. Los requisitos para tener este beneficio apuntaban a no consumir bebidas alcohólicas o sustancias estupefacientes, fijar un domicilio, presentarse con cierta periodicidad ante la Justicia, conseguir trabajo, entre otras reglas. No lo cumplió.
El sábado pasado condujo alcoholizado y chocó con su auto azul metalizado contra un árbol. Se negó a que le realizaran el control de alcoholemia y quedó demorado (luego liberado). Además, fue acusado de haber querido agredir y abusar de una joven que estaba con él.
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Tras esta seguidilla de escándalos públicos, los jueces del Tribunal Oral en lo Criminal Nº 1 de Bahía Blanca, Ricardo Gutiérrez, Christian Yesari y Hugo Adrián De Rosa, ordenaron el jueves su detención.
Descuartizador. Cuchán fue condenado a 18 años de prisión por el crimen de su novia cometido en 2004. Luciana Jimena Moretti (15) fue encontrada descuartizada y sus partes prendidas fuego en el patio de la casa de su amigo y con quien tenía una relación sentimental en Ingeniero White, en el partido de Bahía Blanca.
Durante once días no se supo nada de Luciana. “Estoy con Claudia, ahora voy”, le dijo la joven a su mamá por teléfono. Esa fue la última comunicación que tuvo con su familia. Era mentira que estuviese con su amiga, porque luego se comprobó que esa chica Claudia estaba trabajando en ese horario. El llamado se registró desde un celular que pertenecía a Cuchán.
Más tarde, en un basural, se encontró la dentadura de un cráneo que había sido quemado. Los peritos determinaron que pertenecían a la adolescente. La Policía fue a la casa de Cuchán, donde vivía con sus padres y una hermana discapacitada y allanó la propiedad.
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Allí se encontraron restos de cabello y, en el fondo de la vivienda, una bolsa plástica de residuos que contenía el resto del cuerpo. Los peritos comprobaron que los restos óseos habían sido quemados. Al parecer, en el fogón del quincho de la familia. Cuchán, de 25 años entonces, quedó detenido.
El acusado fue condenado el 16 de julio de 2007 por el crimen de la adolescente con la que mantenía una relación sentimental. El 19 de abril de 2016 fue beneficiado con la libertad condicional y desde entonces se encontraba en la localidad de Monte Hermoso, a unos 100 kilómetros de Bahía Blanca.
Asesino de Tinder. “El femicida de Luciana Moretti, Pablo Víctor Cuchán, nuevamente en Tinder. Por favor compañeras, difundan. En 2004 la descuartizó y quemó su cuerpo en una parrilla”, publicaron en las redes sociales agrupaciones feministas. Y el hombre volvió a ser noticia.
Comenzó una campaña para visualizar y escrachar al femicida sobre su actividad en la aplicación de citas conocida como Tinder. Su perfil era “Vic29”. También se identificaba como “Pablo” y siempre mostraba su cara en su imagen de perfil.
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“Compañeras que sean de o visiten Monte Hermoso y la zona, por favor, tengan cuidado y difundan”, advirtieron entonces en otra publicación.
Ultimo ataque. Una joven de 27 años dijo que sufrió un intento de abuso y agresión por parte de Cuchán. Según se informó, el sábado pasado la chica lo había conocido en la casa de su amiga y ambos salieron a comprar unas cervezas a bordo de su auto Citröen C4 azul.
Según relató la mujer ante la fiscalía de flagrancia a cargo de Claudia Lorenzo, en el trayecto Cuchán la agarró el cuello como para darle un beso, ella se resistió, abrió la puerta del auto y se tiró.
El femicida continuó la marcha, chocó contra un árbol y quiso escaparse a pie, aunque fue detenido en el cruce de Teniente Farías y Piedra Buena, de Bahía Blanca, por los efectivos de la comisaría 1ª y del Comando de Patrullas local.
Tras permanecer alojado en una comisaría, el femicida recuperó la libertad, pero no por mucho tiempo. Este jueves ordenaron su captura y a la mañana siguiente se presentó en los tribunales junto a su abogado, dispuesto a cumplir el resto de la pena.
