POLICIA
Crimen en Gualeguaychú

La abuela de Nahir declaró que vio a Pastorizzo golpear a su nieta pero no lo denunció

Brígida Gálvez declaró que vio cómo el joven asesinado maltrataba a Galarza, pero que no dijo nada por pedido de Nahir. Qué más dijo.

Nahir Galarza
Nahir Galarza | Captura

La abuela de Nahir Galarza decidió declarar este martes en defensa de su nieta ante el Tribunal que la juzga por el homicidio de su presunto novio Fernando Pastorizzo y aseguró que vio cómo el joven golpeaba a Galarza, quien le pidió que guardara silencio ante su familia.

Brígida Gálvez, de 78 años, vive en la planta baja del mismo edificio donde vivía Nahir Galarza con su familia. En ese marco declaró que vio a "este chico", en alusión a Pastorizzo, tomando de los pelos y arrastrando a la estudiante de abogacía de 20 años. 

"A Pastorizzo lo conozco, sí, de paso. Yo le voy contar algo", dijo Brígida al tribunal sin que se lo preguntaran. "Fue en el verano del año pasado, vivo cerca de los boliches, me levanté para tirar agua porque es una asquerosidad todo lo que dejan. Y mi nieta gritaba, 'soltame, soltame', decía, la tenía de los pelos y del cuello. Yo salí. '¿Qué estás haciendo?', le grité. Agarró la moto y se fue", aseguró la abuela de Nahir. La joven, según el testimonio, le habría suplicado que no diga nada. "'Por favor, abuela, no le contés nada a mis padres.'", le habría dicho. "Mi nieta me pidió que no diga nada", relató la abuela, según consignó El Día de Gualeguaychú. Al ser consultada acerca de qué hizo al respecto, remató: "Le dije que no iba a hacer nada porque no quería andar mal con mi nieta".

Consultada si sabía de la relación entre ambos, Brígida aseguró que "no sé qué relación tuvieron", que su nieta "nunca lo presentó como el novio, no lo vi tomando mate en casa, nunca vi que lo tomara de la mano, nunca le daba un beso".

"¿Y cómo sabe que no le daba besos?", le preguntó el fiscal Lisandro Beherán, el principal encargado de la acusación de confrontar las aparentes contradicciones de los testigos de la defensa con modos filosos y papeles en mano. "¿Usted controlaba qué pasaba en la pieza de Nahir?", siguió Beherán. "Noooo, no la voy a espiar constantemente", contestó la abuela.