Ronaldo Chaparro Villalba, un hombre de 35 años de nacionalidad paraguaya, había sido visto por última vez en la madrugada del domingo 27 de octubre, día de las elecciones nacionales. Sin embargo, luego de informarle a su familia que iba a jugar al pool a un bar, no se supo más nada de él.
A la semana, y sin noticias de la Policía, la familia tomó una drástica decisión: recurrió a una vidente para saber del paradero del hombre. La futuróloga les indicó a los familiares el supuesto lugar donde estaba el cadáver y acertó: lo encontraron sin vida en un pozo ciego.
El hecho ocurrió en la localidad de Trujui, en jurisdicción del distrito de la zona oeste del conurbano de Moreno. Chaparro Villalba fue encontrado asesinado a puñaladas.
Fuentes judiciales informaron a la agencia Télam que familiares de la víctima habían denunciado su desaparición ya que no sabían nada desde esa noche en la que estuvo en un bar jugando al pool.
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En ese marco, personal policial comenzó a buscar al hombre bajo las instrucciones de la fiscal Gabriela Urrutia, en una causa por "averiguación de paradero". Según las fuentes, los efectivos de la comisaría 2da. de Moreno realizaron varios operativos de búsqueda en el marco de la investigación, pero todos ellos dieron resultado negativo.
Ante esa situación, la familia de Chaparro Villalba convocó a una vidente y, según dijeron a las autoridades, la mujer les indicó el lugar donde supuestamente estaba el cadáver.
Con ese dato, los parientes del hombre, que no tenía hijos, se dirigieron ayer por la noche hasta un asentamiento lindero a la base aérea de Moreno y encontraron el cuerpo de la víctima dentro de un pozo ciego a medio construir, tapado con basura y en avanzado estado de descomposición.
Los familiares que lo reconocieron por su vestimenta llamaron al número de emergencias 911 y la policía constató que había un cadáver.
A simple vista, el médico legista comprobó que el hombre tenía heridas de arma blanca, aunque los investigadores aguardaban el informe preliminar de la autopsia que se iba a realizar esta tarde.
Tras el hallazgo del cuerpo, la causa pasó a manos del fiscal Leonardo Ventricelli, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 de Moreno.
El funcionario judicial dispuso una serie de medidas tendientes a dilucidar el homicidio y se entrevistó con su familia, que confirmó que la vidente les había señalado el punto donde finalmente apareció el hombre.
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Las hipótesis. Chaparro Villalba había obtenido unos siete mil pesos en un campeonato de truco en el bar del barrio Santa Brígida en el que había sido visto por última vez. En ese sentido, analizan si el dinero o una pelea por el juego de cartas pudo haber generado alguna disputa con un trágico desenlace.
Tampoco descartaban que haya mantenido una pelea con otros clientes y que lo hayan asesinado por alguna disputa de vieja data.
"No sabemos si quisieron robarle o lo mataron por bronca y lo tiraron en un pozo ciego envuelto en una sábana", dijo a Télam una sobrina de la víctima, quien pidió "Justicia" por su tío.
La chica contó que el hombre trabajaba en una fábrica de Don Torcuato hacía cuatro años, en la semana vivía en General Pacheco junto a su tía y los fines de semana iba a Trujui a la casa de un hermano suyo.
La investigación del personal de la seccional 2da, de Moreno y de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) local continuaba este martes para identificar a el o los autores del crimen.
ED CP
