Dos cuerpos descuartizados hallados en un contenedor de basura generaron conmoción en Rosario. Una de las sospechas que tiene la Justicia es que detrás de este hecho podría estar Brandon Bay, un joven que está preso en la cárcel de Piñero, acusado de liderar una banda narcocriminal y que tiene un perfil “muy violento”. El propio ministro de Seguridad local lo describió como un “animal”, que “ordena matar a lo mexicano” y que pretende controlar el negocio narco “a través de la violencia extrema”.
Brandon Bay es sindicado como el líder de la banda de Los Gorditos. Tiene 25 años y está preso en la cárcel de Piñero. El encierro no fue un impedimento para él para seguir dando órdenes a los suyos para mandar a matar, extorsionar, generar balaceras y amenazar a distintas personas para ganar terreno y explotar el “negocio narco”.
Según explica a PERFIL el diputado provincial por el Frente Social y Popular e investigador sobre el narcotráfico, Carlos Del Frade, la llegada de Bay a la escena del mapa narco rosarino “es la aparición de generaciones mucho más violentas, más feroces y que se quieren quedar a partir de impartir el miedo con territorios que antes eran de otros sectores”.
El cabecilla de la banda de Los Gorditos cumple una condena a 5 años de prisión como acusado de realizar balaceras, usurpaciones, extorsiones y tentativas de homicidio; y el junio pasado fue acusado de comandar una asociación ilícita vinculada con la narcocriminalidad y con una serie de homicidios.
“Bay es uno de los lugartenientes más violentos del narcotráfico ya que tiene 25 años y es un animal”
Una banda "familiar"
Pero hace unas semanas sumó una imputación más. Tras la detención de sus dos hermanas antes de Navidad y otros miembros de la familia los fiscales Pablo Socca y Valeria Haurigot los acusaron de formar parte de una asociación ilícita. Según los funcionarios, las hermanas de Brandon seguían las órdenes de él desde la cárcel y se encargaban de regentear la actividad de narcomenudeo en búnkeres, conseguir soldaditos para producir las balaceras, extorsionar a las víctimas para no usurparles las viviendas y exigirles dinero a cambio.
En esa audiencia de imputación contra Bay y su familia se revelaron audios (ver aparte) que los fiscales atribuyeron al líder de Los Gorditos, en donde ordenaba “descuartizar a lo mexicano”. Esta es una razón por la que tras el hallazgo el 21 de diciembre de los cadáveres desmembrados de Jorge David Giménez (29) y Víctor Martin Baralis (44) en contenedores de basura en el sur rosarino se sospecha que el Gordo Brandon podría estar tras este ataque.
El mismo ministro de Seguridad santafesino, Marcelo Sain, sostuvo que “Bay ordena matar a lo mexicano” y entiende que “para nosotros está delineada la investigación” sobre el caso de los dos hombres descuartizados que apuntan a él como ideólogo.
“Bay es uno de los lugartenientes más violentos del narcotráfico ya que tiene 25 años y es un animal”, sostuvo el ministro esta semana y aseguró: “Pretende controlar un negocio de alta rentabilidad a través de la violencia extrema, y desde el Servicio Penitenciario”.
Por su parte, el diputado provincial Del Frade explicó que Bay utiliza una “perversión” que “no se conoció en otras bandas narcos rosarinas” como Los Monos o la liderada por Esteban Alvarado, para mencionar dos de las más populares.
“Brandon Bay es un muchacho que está preso, hace más o menos un año, y desde adentro de la cárcel, primero en Coronda y después en Piñero, maneja una banda generando algunos asesinatos verdaderamente atroces. Como dice en sus grabaciones recomienda cortar a sus enemigos o a quienes lo traicionan a la mexicana con una sierra”, detalla el especialista sobre narcotráfico y recuerda que en escuchas atribuidas a Bay, este “les exige a sus sicarios que le tiren a la cabeza a los bebés”.
“Esta perversión no existía en otras bandas narcos, salvo una vez, un integrante de Los Monos llegó a decir ‘tiren a mansalva’. Pero con ese nivel de precisión en la ferocidad de tirarle a la cabeza de un bebé para generar miedo y terror en la vecindad no se vio en ningún lado”, destacó Del Frade.
La banda de Los Gorditos, explica el especialista, es “una especie de desprendimiento original de la banda Los Monos” a partir del año 2013, cuando se produce el asesinato de su líder, Claudio “Pájaro” Cantero.
“A partir del crimen de Cantero, se disgregan desde la zona sur de Rosario y empiezan a tener una fuerza significativa en Villa Gobernador Gálvez, una ciudad pegada a Rosario, y luego pasa a una zona del norte de Rosario: en el departamento de San Lorenzo. En la zona norte de esa ciudad comienzan a manejar el negocio del contrabando de armas y la distribución de la cocaína y empiezan a aparecer asesinatos a chicos, con lo cual se marca, una vez más, a fuego esta idea de la gran ferocidad de la banda”.
“Lo voy a cortar en pedazos”
“Escuchame, de paso van a buscar el tornado y de paso matamos a un par de zombies, me voy a llevar a uno. Te mando un video con una motosierra, fijate cómo lo voy a cortar en pedazos, bien a lo mexicano le voy a dar”. Para los investigadores, el que habla es Brandon Bay y así lo expusieron en una audiencia en la que lo imputaron el 23 de diciembre pasado junto a sus dos hermanas como integrantes de una asociación ilícita que amenaza, extorsiona y balea a sus enemigos o víctimas para ganar terreno en su negocio narco.
Según la investigación de los fiscales Valeria Haurigot y Pablo Socca, en esta comunicación Brandon habla con su cuñado. “Poné a los pibes en auto, me entran a buscar la moto y se llevan a uno y lo mando a cortar en pedazos. Que se vayan de la casa le mando un video así con la motosierra cortándolo en pedacitos, que se vayan de la casa, que se vayan todos de mi barrio. A un tal Elías lo queremos hacer cagar”, indica la voz y le responden: “Sí, hacemos así señor, quedate tranquilo”.
Aldana y Flavia Bay fueron imputadas por seguir las órdenes de su hermano Brandon fuera de la cárcel. Mientras que el propio líder y su ex cuñado Sebastián Aguirre, y su primo Claudio Ríos fueron reimputados, acusados de integrar esta asociación ilícita dedicada a generar violencia y miedo con fines económicos.
NG
