Otro grave hecho de inseguridad tuvo lugar esta semana en la ciudad de Buenos Aires. Es que después de que el lunes a la madrugada mataran a un joven venezolano 27 años para robarle su celular en el barrio de Palermo, en las últimas horas una familia de Recoleta fue víctima de un violento robo que incluyó disparos con arma de fuego.
El hecho de inseguridad tuvo lugar este jueves 9 de marzo alrededor de las 21. Fue cuando una familia se preparaba para cenar y fue sorprendida por tres delincuentes que ingresaron a su departamento ubicado en un edificio de la calle Gallo al 1400 en uno de los barrios más vigilados por la Policía de la Ciudad.
De acuerdo a la información que surgió del relato de los denunciantes, una mujer permanecía con su hija en el interior de su departamento a la espera de la llegada de su marido. Alrededor de la hora mencionada antes, este tocó el portero eléctrico para avisar de su arribo por lo que la mujer mandó a la hija a que baje a abrirle.
Hablemos claro: Seguridad es mucho más que una pistola Taser
La mujer lo hizo sin saber que sería sorprendida por los ladrones. Es que estos tres varones habían ingresado previamente al edificio de una manera que los investigadores todavía tratan de establecer. Una vez adentro se quedaron escondidos en un pasillo a la espera de la oportunidad de ingresar alguno de los departamentos.
Cuando se abrió la puerta aprovecharon para entrar a la propiedad y robar. Fueron unos pocos minutos adentro del departamento hasta que huyeron con dispositivos electrónicos y la mujer pudo avisar vía portero eléctrico a su marido y a su hija de lo que había pasado y que los tres delincuentes escapaban en dirección a la salida.
Una vez abajo, los delincuentes se encontraron con el marido de la mujer a la que habían asaltado y en el raid para escapar, sacaron un arma de fuego y le dispararon. Afortunadamente ninguna de las balas alcanzó al hombre que permanece sano y salvo.
La escapatoria de los delincuentes
Los autores de la entradera escaparon a bordo de un Toyota Corolla que fue encontrado abandonado a unas pocas cuadras en la esquina de Coronel Díaz y Soler, publicó La Nación. Adentro había una pistola y una vaina servida.
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“No vi nada, pero la Policía me comentó que los ladrones entraron al edificio, se quedaron esperando en un pasillo y justamente cuando el marido de la vecina tocó el portero eléctrico para que bajaran a abrirle la puerta aprovecharon y asaltaron a la señora”, contó el encargado del edificio en una entrevista con el medio mencionado.
“La mujer estaba cocinando y la nena bajó a abrirle. Ahí aprovecharon a entrar”, agregó el trabajador que dijo no saber de qué manera lograron entrar los delincuentes al edificio.
El hecho ocurrió luego de una seguidilla de episodios de inseguridad graves como le fue el asesinato de una efectivo de la Policía de la Ciudad en la estación Retiro de la línea C del subte. Otro, el asesinato de un joven oriundo de Venezuela durante la madrugada del pasado lunes en pleno Palermo.
Son sólo dos de una serie de hechos registrados en el último mes y que dan cuenta de que la ciudad no está exenta de un fenómeno preocupante.
AS CP