Claudio Flores, un jubilado de 84 años que era intensamente buscado en la localidad de Luis Guillón desde el sábado 1 de mayo, fue encontrado muerto en la clínica Los Cedros, en San Justo. En un video captado por una cámara de seguridad se puede ver como el hombre es subido a la rastra al baúl de un auto, hecho por el cual su familia emprendió la búsqueda.
Ezequiel, un sobrino de Claudio Flores, sostuvo en diálogo con TN que el jubilado se encontraba en conflicto con su familia. Sin embargo, aseguró que se contactó con ellos para pedir ayuda y agregó que una vecina del jubilado le robaba las pastillas para el corazón. "Hace dos semanas el nos pide ayuda, nos manda a llamar con Hugo, un vecino. No tenía pastillas para el corazón porque ella se lo sacaba para su madre", dijo el joven, refiriéndose a la vecina del fallecido jubilado. Luego sentenció: "Ella lo planeó todo".
Sobre el video, el joven contó que "se lo llevan ya fallecido" y aseveró que el jubilado no había vendido la casa donde vivía. En ese marco, se conoció que un abogado estaba pidiendo la propiedad argumentando que la había comprado. Guiado por rumores y por el conocimiento del estado en el cual vivía su tío, Ezequiel afirmó que el hecho estuvo pautado entre el abogado que pide la propiedad y la vecina del jubilado. "A él le daban 20 mil pesos y cobraba 70", sostuvo el joven.
Además, el sobrino de Flores agregó que no pueden ingresar a la casa del jubilado ya que se encuentra custodiada por un cuidador privado. "Es todo muy raro", sentenció Ezequiel.
El video
En una de las cámaras de seguridad apostadas en el barrio donde vivía el jubilado, se puede ver como tres hombres lo cargan al baúl de un auto. A partir de ese registro, que fue posterior a que empezaran a buscarlo, los familiares comenzaron a sospechar que se trataba de un asesinato para usurpar la casa.
En ese contexto aparece un abogado llamado Alejandro Pérez, de 45 años, quien argumenta haber comprado la propiedad hace un año y que le permitía a Flores vivir allí por la pandemia, según consignó Infobae.
Desde su desaparición en la madrugada del 1 de mayo hasta que lo encontraron en la clínica Los Cedros, el caso es un enigma. Además, el jubilado apareció muerto en esa clínica a 17 kilómetros de su casa, en San Justo, un viaje de aproximadamente 30 minutos en auto.
De acuerdo al relato de la familia, la casa se encuentra cercada por un cordón policial y en el interior está siendo custodiada por un cuidador contratado por el abogado que afirma ser dueño de la casa. “Hay un abogado que le hizo firmar un poder a mi tío, así le sacó su pensión. También le hizo creer que su casa estaba hipotecada, por eso le decía que no recibía su jubilación”, sostuvo Mabel González, una de las sobrinas del jubilado en una nota con El Diario Sur.
GI/FL
