El enfrentamiento entre el senador Miguel Angel Pichetto y Cristina Fernández de Kirchner sumó otro capítulo ayer mientras se desarrollaba la sesión en la Cámara Alta.
Indignado por la cantidad de fotos que se estaban sacando en el recinto, Picheto le pidió la palabra a Gabriela Michetti para quejarse del trabajo que estaban realizando los fotógrafos en el recinto.
"Tengo un gran respeto por la actividad de los fotógrafos, pero hace cinco horas que nos cruzan con fotos permanentes… ¡Están fotografiando desde todos los costados!-, se quejó, molesto.
A Michetti le sorprendió el planteo. “Siempre se sacan fotos… a mi me han sacado 700”, comentó. Pero Pichetto le aclaró que “no fue siempre así”.
En el recinto se generó un barullo y el rionegrino, con ánimo de ponerle fin a la cuestión, propuso que las fotos sean sacadas en la previa, salvo en los casos donde los senadores pidan específicamente ser fotografiados cuando hablan. “Durante la sesión queda todo televisado…”, señaló Pichetto.
Ante el desconcierto de lo que sucedía, Cristina Fernández de Kirchner le solicitó a Michetti una explicación. “Me distraje un minutito”, reconoció la senadora, mientras la vicepresidenta explicaba la insólita situación. La cara de incredulidad de la expresidenta resumió la increible situación que se estaba viviendo.