Dos familiares de las víctimas de la AMIA pidieron este lunes ser querellantes en una causa contra el ex canciller Héctor Timerman, sospechado de haber reconocido en una conversación telefónica con dirigentes de la comunidad judía que Irán fue el país que cometió el atentado a la AMIA.
Luis Czyzewski y Mario Averbuch, padres de Paola y Yanina, víctimas del atentado de 1994, se presentaron en el juzgado de Claudio Bonadio donde se investiga a Timerman por "traición a la patria" y pidieron convertirse en querellantes.
Czyzewski y Averbuch, respectivamente padres de Paola y Yanina, le aportaron a Bonadio “hechos nuevos que pretendemos que investigue” porque “es de inusitada gravedad que no haya consultado al servicio jurídico para la confección del Memorándum de Entendimiento, sino al entonces subdirector de la Agencia Federal de Inteligencia, Juan Martín Mena, el líder de la organización extremista Quebracho, Fernando Esteche y el presunto representante del gobierno iraní, Jorge Alejandro 'Yussuf' Khalil", explicó su abogado Juan José Ávila, a la Agencia Judía de Noticias (AJN).
“Hay una nota de marzo de este año del diario Clarín, que obtuvo gran cantidad de información de la Cancillería y en ese conjunto de documentación había una nota de la funcionaria tal vez más idónea y con más experiencia del servicio jurídico (por Susana Ruiz Cerutti) que decía que ni ella ni su equipo habían tenido intervención; es decir que para constituir correctamente la voluntad del Estado en un acto administrativo de la trascendencia de éste no se consultó a quienes debían”, destacó el letrado de los familiares.
Y agregó: “Esto coincide con una nota que publicó el diario La Nación en septiembre de 2007, firmada por Jorge Rosales, que da cuenta de lo que dijo el vocero de la Cancillería iraní respondiendo a una intervención del ex presidente Kirchner: que por razones humanitarias, la República Islámica de Irán estaba ofreciendo constituir una comisión, que andando el tiempo, absolutamente todo lleva a pensar que es la misma que se plasmó en el Memorándum de 2013”, puntualizó.
“Pensamos que estas tres circunstancias tienen una concatenación muy sugestiva y que, por tanto, iluminan con otra luz lo que había planteado el fiscal Nisman, sobre todo una escucha del día que se tomó conocimiento del Memorándum o el siguiente, en la que nada menos que Khalil aparecía solazándose como que había sido uno de los redactores de este Memorándum, conjuntamente con D’Elia y Esteche”, concluyó Ávila.
Czyzewski y Averbuch le plantearon además al juez que debería investigarse por qué no se solicitó al servicio jurídico de la Cancillería asesoramiento para la confección del Memorándum, señaló el abogado Juan José Ávila a la Agencia Judía de Noticias (AJN).
La causa que instruye Bonadio podría ser una de las formas de reabrir la denuncia que impulsó el fiscal Nisman, cuatro días antes de morir, contra Timerman y la ex presidenta Cristina Fernández. De momento, se aguarda que dirigentes de la comunidad judía se presenten en las próximas horas en el juzgado de Daniel Rafecas, que en febrero de 2015 cerró aquella denuncia, para pedir su desarchivo.
Según consignó Clarín, otras presentaciones judiciales simultáneas intentarán hoy reabrir la denuncia de Nisman contra Cristina. En primer lugar, el presidente de la DAIA, Ariel Cohen Sabban, pedirá a Rafecas que acepte a su entidad como querellante en la denuncia de Nisman.
Por otro, el fiscal Moldes solicitará que se declare nula la reunión en que Freiler y Ballestero confirmaron el archivo de la causa. A la par, el abogado Ricardo Monner Sans reclamará que se investigue la actuación de los jueces y fiscales que intervinieron en el trámite de la clausurada denuncia de Nisman y pedir su reapertura. Ahora, el juez Martínez De Giorgi deberá girar las actuaciones al fiscal Franco Picardi para que determine si requiere el inicio de una investigación penal.
