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Cuando Alberto Fernández cuestionaba la "corrupción en la gestión progresista" de Cristina, Boudou y José López

En un artículo publicado en 2017, el candidato del Frente de Todos analizó los dilemas éticos del "progresismo latinoamericano", y criticó la gestión de la expresidenta.

Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner
Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner. | NA PRENSA ALBERTO FERNÁNDEZ.

Alberto Fernández planteó las razones que, a su criterio, llevaron a los gobiernos progresistas a cometer errores en la búsqueda de una sociedad más igualitaria, entre los que menciona los "dilemas éticos", y puso el foco principal en la corrupción, en particular en causas que involucran a Cristina Kirchner, José López y Amado Boudou. Así surge de un artículo de análisis político y económico de 2017, que el ahora candidato presidencial del Frente de Todos publicó en un libro de ese año y se difundió esta semana.

El texto, que hace un recorrido por los gobiernos progresistas de América Latina en el siglo XXI, fue publicado en el libro "Claroscuro de los gobiernos progresistas. América del Sur: ¿Fin de un ciclo histórico o proceso abierto?", de la Editorial Catalonia de Santiago de Chile. En los últimos días, la revista Crisis recuperó su artículo de esa publicación, que no fue distribuida en Argentina. Allí, el compañero de fórmula de la senadora Cristina Kirchner enuncia una fuerte crítica contra sus dos mandatos, y si bien destaca "su enorme capacidad para ampliar derechos de minorías sociales", como las reformas legales que instituyeron el voto joven, la identidad de género, la fertilización asistida gratuita y el divorcio express, señala los fracasos en varios temas de su gestión.

"Cristina impuso un modo de ejercer la política que siempre tuvo en la confrontación su principal eje. Y aunque a nadie escapa que la política es en esencia representación de intereses y que muchas veces ellos entran en contradicción", sostiene en el escrito su ex jefe de Gabinete. "¿Cómo encontrar ética progresista en un Gobierno que convierte en enemigo a quien señala diferencias o simplemente reclama correcciones en la gestión de la cosa pública?", cuestiona. Para Fernández, la expresidenta "fue incapaz de trastocar los cimientos" de una economía concentrada que "en nada ayudaba a los más postergados".

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El dirigente peronista califica a la corrupción como "un flagelo", y se refiere a las causas que involucran a exfuncionarios del gobierno kirchnerista: José López, Amado Boudou, y a Cristina Kirchner. "José López (...) Fue quien administró el presupuesto del Estado para la realización de obras públicas en una gestión que se presentó como "progresista"' y que puso en la construcción de viviendas y de infraestructura vial uno de los ejes de la acción de gobierno", dice.

El exfuncionario de Néstor Kirchner apunta además a que "el efecto dañoso de la corrupción se potencia cuando el hecho corrupto emana de quien dice ser progresista", porque implica que es cuando se percibe el perjuicio que hace de los recursos del Estado quien dice querer preservar "a los sectores más desposeídos".

En el apartado "Argentina: el dilema entre callar o ser funcional al enemigo", Fernández menciona a Amado Boudou, y sostiene que "se colocaba de ambos lados del mostrador de los reclamos" en una causa que se lo imputa por "haberle exigido" a la provincia de Formosa, cuando era ministro de Economía de la nación, que contrate a una consultora a la que estaba relacionado "para que renegocie pasivos que esa provincia mantenía con el Estado nacional". Además, hace referencia a la acusación judicial por intervenir en la venta de la empresa gráfica dedicada a la fabricación de papel moneda.

Sobre el segundo mandato de Cristina Kirchner, dice que fue un gobierno "políticamente fuerte", con una fuerza política "domesticada e incapaz de reconducir los desvíos del poder".

Al referirse a la senadora de Unidad Ciudadana, dice que "se encuentra incursa" en presuntos hechos de lavado de dinero por los contratistas de inmuebles y hoteles de su propiedad, que "se habrían visto beneficiados" en el otorgamiento de distintas licitaciones. En palabras del exjefe de gabinete, eso lleva a pensar que "servían de pantallas" para blanquear presuntas dádivas derivadas de la obra pública, lo que calificó como "una clara falta de ética" al involucrar intereses privados con prestadores estatales de servicios.

En ese sentido, el candidato del peronismo estima que esto pudo darse por la situación de un Gobierno "políticamente fuerte", que tenía mayoría absoluta en ambas Cámaras, con instituciones de la república "relajadas" y una fuerza política "domesticada incapaz de reconducir los abusos y desvíos del poder", lo que desembocó en un contexto apropiado para permitir que la corrupción "se expanda".

Por último, Fernández considera que permitir que el poder se concentre en una o en pocas personas "dificulta que el control social reaccione ante los abusos y delitos en que incurren los poderosos".

A.G./F.F.