El Gobierno de la ciudad de Buenos Aires reabrió este martes al público el espacio de la Plaza de Mayo, tras seis meses de refacción. La misma costó casi 44 millones de pesos.
La obra en cuestión amplió la superficie del espacio público en casi 7.200 metros cuadrados más (pasó de 19.343 a 23.665); y ganó carriles a las calles laterales. Asimismo sumó espacio verde e iluminación y también se restauró la Pirámide de Mayo.
Desde el Ministerio de Ambiente y Espacio Público porteño, habían explicado meses atrás que las obras se enmarcaban dentro del plan de renovación y puesta en valor del eje cívico de la Ciudad.
En esa ocasión detallaron que el espacio contaría con mayor iluminación desde el piso, canteros con bancos, y grupos de pequeños árboles y palmeras, entre otras mejoras.
El ministro de Ambiente y Espacio Público, Eduardo Macchiavelli, manifestó que con esta obra, por la que se invirtieron poco menos de $44 millones, se ampliaron las superficies de encuentro y se incrementó el espacio de veredas y senderos peatonales. Con la obra se ganaron dos carriles vehiculares de cada lado de la avenida Hipólito Yrigoyen y avenida Rivadavia, según consignó el diario La Nación.
Polémica por las rejas. Una foto que comenzó a circular días atrás en redes sociales mostraban la instalación de rejas que cruzan transversalmente la plaza y esto provocó rechazo. Desde la cartera de Ambiente y Espacio Público explicaron que se instalaron rejas y portones que cuentan con un sistema de plegado que facilita el flujo del tránsito y que las mismas pueden ser desmontadas en 48 horas.
Ante esto, el Observatorio de la Ciudad presentó un amparo que recayó en el juzgado en lo Contencioso, Administrativo y Tributario N° 8 y que debería ser respondido por el Gobierno en los próximos días.