Mientras en Capital Federal continúan las tomas en al menos nueve escuelas públicas, en el interior del país comenzaron a florecer reclamos estudiantiles en donde también adquirieron como medida de fuerza, la toma de las instituciones educativas.
Tal es el caso de los estudiantes de la Universidad Nacional de Tucumán quienes a partir de dos violaciones sexuales que se sucedieron en el Parque 9 de julio en el mismo mes y la nula respuesta de las autoridades a los reiterados pedidos de mayor seguridad y asistencia a las víctimas, decidieron tomar las facultades de Filosofía y Letras, Psicología, Artes y Ciencias Naturales.
Así mismo, hoy se cumplen once días desde que la Universidad Nacional de la Rioja está tomada por sus alumnos en reclamo “por la modificación del estatuto estudiantil, y la eliminación de la reelección indefinida y para estar ahí hasta que se le acepte la renuncia a Tello Roldán", según esgrimieron en un comunicado.
En tanto, la ciudad de Famatina unificó su propia lucha por los fondos públicos que le retiene la provincia y la situación de la UNLaR. En ese marco, el lunes a las 19 el pueblo y gobierno de Famatina se movilizarán a la plaza principal de la localidad exigiendo "democracia real para la UNLaR y para todo el pueblo riojano".
En lo que respecta a Capital Federal, si bien se conoció que el colegio Nacional Buenos Aires levantó la toma, todavía hay nueve escuelas que continúan con sus actividades interrumpidas. En ese contexto, la vicejefa de Gobierno porteño, María Eugenia Vidal, señaló hoy que la administración que lidera Mauricio Macri “no va a dejar de trabajar” en relación al problema en la educación. Sin embargo, para minimizar el conflicto, Vidal remarcó que si bien con que haya una sola escuela tomada es un problema, en la ciudad, “hay 1200 establecimientos que funcionan normalmente”.