El secretario de Seguridad, Sergio Berni, dijo hoy desconocer "la manera de desalojar de forma pacífica" las protestas con cortes de tránsito en vías neurálgicas y acusó a la Justicia Contravencional porteña de impedir que las fuerzas de seguridad actuaran ayer para liberar el "piquete" de cooperativistas en el centro.
Además, atribuyó la concreción de la mayoría de las manifestaciones que incluyen piquetes en la Capital a "cinco locos que creen que la ciudad de Buenos Aires es de ellos", como el realizado en la tarde de ayer en el centro porteño, que terminó con un campamento y otro corte en el Bajo, frente al Ministerio de Trabajo de la Nación.
"Tenemos cinco locos que creen que la ciudad de Buenos Aires es de ellos, hacen estas actividades en la calle... y la gente tiene que saber que la Justicia Contravencional banca estas acciones de los 'piqueteros' y le importa tres pepinos los cientos de miles de automovilistas que quieren circular por la ciudad", se quejó Berni.
Luego, el funcionario kirchnerista diferenció los bloqueos de tránsito en la ciudad de Buenos Aires de los concretados en autopistas como la Panamericana, al sostener que los últimos constituyen un "delito federal" y resaltar que, en ese caso, puede intervenir la Gendarmería Nacional, aunque también cargó contra la Justicia Federal.
En diálogo con radio 10, afirmó que "la fiscalía dice 'que no se actúe, que se trate de solucionar en forma pacífica'" e inquirió: "Explíqueme cómo desalojo el otro día la Panamericana en forma pacífica. La verdad no conozco la manera de desalojar de forma pacífica".
"¿Qué hay que decir? 'Señor piquetero, es tan amable de retirarse'. 'Sí, como no, señor gendarme, ya nos estamos yendo porque sabemos que estamos causando molestias a los automovilistas'", ironizó.
Ayer, además de obstruir la circulación en el centro y el Bajo de la ciudad de Buenos Aires, integrantes de la Asociación Gremial de Trabajadores Cooperativistas Autogestionados y Precarizados (AGTCAP) concretaron bloqueos de tránsito en 12 provincias.
Los manifestantes reclamaron la nacionalización de programas del Ministerio de Trabajo y el aumento de los 1.300 pesos que recibe por mes cada integrante de esa entidad.
