El conflicto entre entidades agropecuarias y el gobierno nacional en 2008 convirtieron al presidente de Federación Agraria, Eduardo Buzzi, en una suerte de estrella mediática. Con ese empuje, el dirigente agrario quiere ser candidato a gobernador en Santa Fe, aunque las encuestas no le devuelven números favorables.
Primero dejará su cargo como presidente de la entidad, que dirige hace 15 años. Las elecciones son el 2 y 3 de diciembre en medio de acusaciones cruzadas por los padrones entre el candidato oficial, Omar Príncipe, y el opositor, el chaqueño Pablo Orsolini. Recién el 9 de diciembre anunciaría su precandidatura a la gobernación.
La gran pregunta es dentro de qué espacio lo hará. Los rumores hasta hace poco lo mencionaban como candidato puesto del Frente Renovador de Sergio Massa. Pero, como su imagen no sube, el tigrense no estaría tan seguro: las elecciones serán en junio de 2015, solo cuatro meses antes que las generales, con poco tiempo para levantar el perfil. Salir tercero, por detrás del socialismo y el PRO sería un mal resultado.
Se suma un detalle no menor: el FR no tiene personería jurídica en Santa Fe. Por eso, Buzzi habló con el del Partido Autonomista, para usar su sello. Y el PA no quiere saber nada con el massismo. Para que la interna sea completa, el diputado nacional del massismo Oscar Cachi Martínez no tiene una buena relación con el del agro.
Quien gana. En la provincia la competencia está entre dos candidatos y ninguno es del PJ. El socialismo llevaría de candidato al senador provincial Miguel Lifschitz y el PRO con el diputado Miguel Del Sel. En tercer lugar aparece María Eugenia Bielsa quien aún no confirmó dentro de que espacio competirá. Desde el sciolismo prenden velas para que sea su candidata, sobre todo después del paso en falso que significó la efímera candidatura a diputado provincial de “Pachu” Peña, que él mismo desmintió.
Los números, por ahora, señalan como ganador al socialista que a pesar de los visibles errores de gestión en materia de seguridad con el problema del narcotráfico, mantiene la buena imagen en Rosario, la ciudad que siempre define la suerte de la provincia.
(*) De la redacción de Perfil.com.