La precandidata presidencial por Cambiemos, Elisa Carrió, acusó al jefe de Gabinete Aníbal Fernández de ser “La Morsa”, apodo mencionado en la causa por el Triple Crimen, de ser socio de los hermanos Juliá, detenidos en España por narcotráfico, y de regresar al primer plano del Ejecutivo para formar parte “del operativo de la muerte de Nisman”.
Carrió también marcó que la razón por la que Fernández abandonó el Gabinete y en 2011 se convirtió en senador fue porque “Estados Unidos tenía claro que junto a los Juliá llevaban droga a España”. “Por eso lo sacan de su cargo y lo llevan de senador, porque sabe mucho y nadie lo quería tocar”, indicó la diputada en Desde el llano en el canal Todo Noticias.
Y luego sostuvo que Fernández regresó como jefe de Gabinete para el “operativo de la muerte de Nisman”. “Aníbal Fernández llega en diciembre, forma parte del operativo de Inteligencia con Milani para liberar la zona de policías y ensuciar al muerto”.
A su vez, la diputada nacional por CC-ARI también señaló que existía una interna por el control de la SEDRONAR entre el precandidato a gobernador bonaerense por el Frente para la Victoria Aníbal Férnandez y José Ramón Granero, extitular del organismo y procesado por tráfico de efedrina.
Disputa provincial. Carrió indicó que en la interna bonaerense del Frente para la Victoria “es una pelea por el control de la droga que involucra a Scioli”. Dentro de esa presunta puja apuntó contra el intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, a quien acusó de “controlar la droga” del distrito más populoso y de ser un “consumidor terrible”.
Además, volvió a asegurar que el precandidato presidencial Daniel Scioli recibe dinero de la droga de parte del jefe de la Bonaerense, Hugo Matzkin. Y afirmó que cuando el espía “Jaime Stiuso se metió en el negocio de la droga, Matzkin ordenó matar al Lauchón” Viale.
Sola. Carrió se diferenció del resto de sus competidores en las presidenciales ya que mientras “ellos callan, yo hablé”. “Siete años me dejaron sola, siete años de muerte por droga, siete años diciéndome que estaba loca”, apuntó.