La diputada por la Coalición Cívica-ARI Elisa Carrió reiteró su "preocupación" por la "incomprensión" que a su juicio reina en la coalición Cambiemos, por el aumento de precios y las consecuencias que éstos tienen. La funcionaria también habló Lázaro Báez al que calificó como el "testaferro de Néstor Kirchner".
Carrió consideró que "hay que terminar con las paritarias lo antes posible" y dijo que "la gente tiene que ganar más", aunque sostuvo que "todo se va a acomodar cuando se arregle con los holdouts".
"Estoy preocupada por la incomprensión que hay en nuestra fuerza (Cambiemos) de lo que está sucediendo con las persona más pobres. Lucho por la comprensión de la situación de los que menos tienen, los precios vuelan en el supermercado", aseguró en diálogo con el programa A dos veces que se emite por el canal Todo Noticias.
Además, Carrió insistió en que "los ajustes tienen consecuencias" y dijo que apoyará un proyecto para que "el transporte forme parte del sueldo, si no, el costo es enorme. Hay que estar pensando más en el otro", advirtió.
Respecto a la detención de Lázaro Báez, insistió: "Quiero que haya condenas, no sólo detenciones: que se siga por Julio De Vido". Sobre la decisión del empresario de no declarar ante el juez federal Sebastián Casanello y presentar en su lugar un escrito, opinó: "Lázaro está amenazando con que si no lo cubren va a hablar", tras lo que aseveró que la familia Kirchner trabaja para asegurar la impunidad del santacruceño: "Báez tiene pruebas contra Cristina. Él era el gran testaferro de Kirchner", disparó.
Carrió criticó el poder judicial y consideró que los jueces federales no llevan a cabo su trabajo como es debido: "No vayan a creer que yo creo en esta independencia de esta justicia federal, que opera cuando el que está pierde el poder, yo quiero que juzge lo anterior y que nos juzge a nosotros".
