"No observó los criterios y pautas resultantes", concluye un informe del Ministerio de Seguridad sobre la pericia realizada por Gendarmería que consideró que el fiscal Alberto Nisman fue asesinado, y expresó que incumple con el protocolo de actuación de la fuerza para la intervención en informes criminológicos en escenas del crimen.
De esta manera, la cartera que encabeza Sabina Frederic constató que Gendarmería, en el informe realizado dos años y medio después de la muerte del extitular de la UFI-AMIA, faltó a las pautas vigentes que se siguen en este tipo de procedimientos al momento de investigar la muerte de Nisman.
"Lo que encontraron los técnicos del Ministerio (de Seguridad) en torno a la pericia de Nisman hecha por Gendarmería es que se tendría que haber realizado en el lugar del hecho", informaron a Télam fuentes de Seguridad.
El estudio pericial de Gendarmería arrojó, en septiembre de 2017, que Nisman fue asesinado, se publicó tras una investigación realizada en las instalaciones del Edificio Centinela, donde se reconstruyeron las características del baño en el que murió Nisman. No se hizo, en cambio, en el interior del propio departamento 2 del piso 13º de la torre Le Parc de Puerto Madero, como indica el protocolo de procedimientos.
A pesar del informe de Seguridad que determina que no cumplió el protocolo, la pericia fue convalidada por la Justicia tanto en primera instancia como en la Sala II de la Cámara Federal, que la ratificó como una prueba válida en noviembre de 2017.
Por esa razón, desde la cartera de Frederic subrayan que cualquier revisión legal del estudio criminológico es exclusiva competencia del ámbito judicial. En ese marco, realizaron este trabajo interno que tendrá como consecuencia la confección de una nueva regulación, única para las cuatro fuerzas federales (PFA, PSA, Gendarmería y Prefectura), que unificará normas y procedimientos para realizar las pericias a pedido del Poder Judicial.
La cartera de Seguridad comprobó que "existía un protocolo para la actuación de las fuerzas en la escena del crimen y su análisis y que la GNA (Gendarmería) no había observado los criterios y pautas resultantes del mismo" luego de solicitar informes por escrito a todas las fuerzas federales en los últimos meses. Los funcionarios concluyeron que el protocolo que fija normas y procedimientos para la actuación en situaciones de "escena del crimen y análisis" establece que las eventuales pericias deben realizarse "en el lugar del hecho".
Murió el jefe de Gendarmería que firmó el peritaje sobre la muerte de Alberto Nisman
Las pericias antecedentes
La pericia de Gendarmería fue realizada por 24 expertos de esa institución. El estudio arrojó como resultado que el fiscal Nisman había sido dopado con ketamina y luego asesinado en su departamento por dos personas. Esto marcó un contraste muy fuerte con las pericias anteriores: una Junta de Criminalistas de la Policía Federal, con la presencia de cuatro integrantes de la División Homicidios y dos peritos de partes; y una Junta Médica en la que participaron 13 miembros del Cuerpo Médico Forense de la Corte Suprema, más la participación de dos peritos de la PFA y el especialista aportado por los abogados de Lagomarsino.
El estudio de la Cuerpo Médico Forense de la Corte estableció que no había certeza pericial médico legal de que se hubiera tratado de un hecho homicida porque no se detectaron rastros de la presencia de otra persona, aparte de Nisman, en el momento del disparo.
Además, se realizó un estudio el Centro de Investigaciones Fiscales del Ministerio Público de Salta, que cuenta con un laboratorio especializado para detectar rastros de deflagración en las manos de una persona. Este análisis concluyó que en las manos de Nisman se hallaron "partículas consistentes con residuos de disparo".
La AMIA ratificó el pedido de "verdad y justicia" por la muerte de Nisman
El juez federal Julián Ercolini aceptó como prueba la pericia de Gendarmería y el 26 de diciembre de 2017 dictaminó que Nisman había sido asesinado en el marco de un plan criminal vinculado a su trabajo como fiscal del caso AMIA. Con esa determinación, Ercolini avaló la pericia de Gendarmería.
En el marco de la causa, ahora el fiscal Eduardo Taiano citaría como testigos en febrero a unos 80 integrantes de los servicios de inteligencia que el día de la muerte de Nisman se comunicaron entre sí y con sus jefes, informaron a Télam fuentes judiciales.
El único procesado como supuesto partícipe necesario del homicidio es el técnico informático Lagomarsino, quien aún no ha sido enviado a juicio oral y que este año logró que le quitaran la tobillera electrónica con la que era vigilado, ya que está sin prisión preventiva.
CI/FF