Ariel Eberstein es uno de los dos contrabajistas argentinos que participan del proyecto (el otro es Martín Rosso), y habló con Perfil.com sobre esta novedad tecnológica en una de las orquestas más importantes del mundo, dirigida por Michel Tabachnik.
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- ¿En qué consiste este nuevo sistema que reemplaza las partituras?
- El sistema de tabletas lo pensó un fagotista de la orquesta y junto a un socio programador crearon neoscores, que, a diferencia de otros sistemas como Finale o Sibelius, está pensado para trabajar en orquesta.
- ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de este sistema?
- La ventaja que yo veo (a pesar de que es una versión beta y aún hay mucho por trabajar) es que podés trabajar a través de una intranet, donde las correcciones de los jefes de fila lleguen al resto de los músicos de su fila sin pérdida de información. El sistema también te permite modificar la partitura y diseñarla a gusto del músico, ya que en la tableta uno tiene cargada la partitura del director y uno puede decidir, no sólo ver, la parte de tu instrumento. La desventaja es que el tamaño debería ser más grande, aunque posiblemente se vayan a crear atriles con cargadores de batería. También se está estudiando el tener una tecnología de e-book para no dañar la vista.
- Es una orquesta que está constantemente llamando la atención...
- Sí. La Filarmónica de Bruselas (ex Orquesta de la Radio Flamenca) recibió el año pasado el Oscar por la película El Artista y hace unos años el Grammy por la película El Aviador. Otro de los acercamientos hacia la tecnología fue la presentación de sus propios ringtones este año.
