Si el juez Norberto Oyarbide “descajoneara” la causa que investiga los crímenes de la Alianza Anticomunista Argentina (Triple A) en los años 70, algunos políticos y sindicalistas podrían entrar en pánico. Pero hay uno en particular al que los expedientes conexos ya perturban: es Hugo Moyano.
El juez civil de Mar del Plata Juan Pablo Rodríguez ordenó que el titular de la CGT, la Federación de Camioneros y el abogado del gremio Daniel Llermanos indemnicen con 70 mil pesos más intereses ($ 140 mil en total) a un hombre que vinculó a Moyano con la banda parapolicial capitaneada por José López Rega, ministro de Bienestar Social de los presidentes Juan Perón e Isabel Perón.
Carlos Petroni es un ex militante del PST que fue aceptado como querellante en la causa que investiga a la Triple A por haber sufrido un atentado. La víctima contó a PERFIL que “a principios de 2007 acusé de intento de asesinato a los miembros de la Concentración Nacional Universitaria (ligada a la Triple A en Mar del Plata) y vinculé a Moyano y a la Juventud Sindical Peronista (JSP), así como a la CGT-Mar del Plata, que él dirigía, como partícipes de la asociación con esa banda terrorista”.
Petroni enfatizó que existía una “íntima relación de los integrantes de la CNU” con Moyano. Sus afirmaciones fueron incorporadas por la Cámara Federal de Mar del Plata al Juicio por la Verdad desarrollado en la ciudad balnearia y ratificadas ante Oyarbide, que sustancia la causa madre.
La víctima sostuvo en el expediente que “en los 70, Moyano mantuvo estrechos lazos operativos, políticos, sindicales y hasta económicos con los integrantes de esa banda, particularmente sus jefes operativos, los doctores Ernesto Piantoni (ex líder de la CNU ya fallecido) y (el ex fiscal) Gustavo Demarchi”.
Para desacreditar ese testimonio, Moyano y la Federación de Camioneros pagaron una solicitada, que apareció el 21 de abril de 2007 en Clarín firmada por el hermano de la víctima, Fernando Petroni, también condenado por Rodríguez.
Allí se acusó a Carlos Petroni de “mitómano” y se afirmó que vivía en Estados Unidos al momento de los hechos denunciados. Por eso, el testigo les inició una querella penal, que ya prescribió, y otra civil por “calumnias e injurias”.
En el fallo, al que tuvo acceso PERFIL, Rodríguez aclaró que “las expresiones utilizadas por los demandados para referirse al actor en la solicitada, como la palabra ‘mitómano’, así como el calificativo de ‘enfermo’ empleado por Moyano (…) o el de ‘enfermito’ al que se refiere una testigo, son disvaliosas tanto en el ámbito privado como en el social”.
Como si fuera poco, se encuentran en trámite otros dos juicios contra Moyano por la aparición de solicitadas contra Petroni en diarios de Mar del Plata.
El pasado setentista parece perseguir al líder de la CGT.