POLITICA
Arrepentido

Condenaron a siete años de prisión a Pérez Corradi por tráfico de efedrina

El empresario fue encontrado culpable de la comercialización de la sustancia para la fabricación de drogas de diseño. Está detenido desde junio de 2016.

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Ibar Pérez Corradi | NA

El empresario Ibar Esteban Pérez Corradi fue condenado este martes a 7 años de cárcel tras ser encontrado culpable del delito de tráfico ilegal de efedrina para la producción de drogas de diseño. Así lo estableció el Tribunal Oral Federal 8, integrado por Nicolás Toselli, Sabrina Namer y Gabriela López, quienes lo sentenciaron por la importación de 9.800 kilos a través de la firma Farmacéuticos Argentinos S.A., y luego otros 1.900 kilos a través de Guillermo Ascona.

Los magistrados tuvieron en cuenta, no obstante, su condición de arrepentido para disminuir la pena de 10 años que había solicitado la fiscalía. De acuerdo al fallo, la sustancia importada era desviada hacia bandas de narcotráfico para fabricar drogas sintéticas, y se pudo establecer que entre los años 2004 y 2008 ingresó al país un  exceso de efedrina que no fue utilizada por la industria farmacéutica.

Para comercializar la droga se utilizó la Droguería Masterfarm, la cual se encontraba a nombre de Jorge Alberto Ochoa. Sin embargo, luego se comprobó que el hombre era sólo era un presta nombre y que el verdadero dueño era Pérez Corradi.

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El empresario, que está detenido desde junio de 2016 tras haber sido capturado en Paraguay, también es investigado en otra causa vinculada al tráfico ilegal de efedrina, según publicó la agencia Noticias Argentinas. En ese expediente también serán juzgados el extitular del Sedronar Ramón Granero, su entonces segundo Gabriel Abboud, el ex director del Registro Nacional de Precursores Químicos Julio Alberto de Oure, y los hermanos Máximo y Miguel Ángel Zacarías.

Los tres exfuncionarios están acusados de haber permitido el ingreso al país de materias primas para la fabricación de drogas sintéticas. Máximo Zacarías, en tanto, trabajaba en el área de Ceremonial del PAMI hasta que una investigación periodística y una denuncia de Mariana Zuvic y Elisa Carrió revelaron que había comprado ambulancias para la empresa Emerger.

Su hermano, Miguel Ángel, era el secretario privado de Granero y se transformó en el nexo entre los importadores y el organismo que debía controlar el ingreso de precursores químicos.

M.S./F.F.