La presidenta Cristina Fernández de Kirchner podría ser dada de alta mañana al mediodía, para continuar con su recuperación médica en la Quinta de Olivos.
Según confirmaron allegados al círculo íntimo de la mandataria, podría dejar la Fundación Favaloro tras seis días de internación, y una evolución sostenida de su salud, luego de que se le drenara un hematoma subdural el martes.
Este mediodía, el vocero presidental, Alfredo Scoccimarro, señaló que la jefa de Estado "está caminando, hojeó unos libros y comenzó a pedir comida". El funcionario detalló que, incluso, en la clínica "le ofrecieron compota de manzana y pidió de ciruela". "Está muy bien" y en "plena recuperación", añadió el funcionario.
La recuperación. Ayer, fuentes de la Casa Rosada le confiaron al Diario PERFIL que pasarán como mínimo unos 45 días antes de que pueda ocupar nuevamente la centralidad de las decisiones, como ocurría antes de ser internada. Sin embargo, también reconocen que la decisión de suspender el reposo dependerá de ella.
En varios despachos del Gobierno estiman –un poco con resignación, pero también con preocupación– que hasta mediados o fines de noviembre el vicepresidente Amado Boudou deberá seguir a cargo del Ejecutivo. “Cristina se recupera bien, pero la operación que tuvo fue delicada, no podrá hacer esfuerzos intelectuales por varias semanas, no estoy esperando que me llame”, describe un ministro y descarta que a la Presidenta se la vea en público durante los 13 días de campaña que quedan hasta la veda, dos días antes de las elecciones legislativas del 27 de octubre.