La disparada del dólar, el nivel de los precios y los salarios rezagados son las principales preocupaciones de Dante Camaño, el líder del sindicato de Gastronómicos de la Ciudad de Buenos Aires. El dirigente gremial no duda en comparar el contexto económico con lo que sucedió en 1989 y explica por qué apoya la precandidatura presidencial de Miguel Pichetto. “Tiene las ideas que el país necesita para avanzar”, explicó. En conversación con PERFIL, Camaño, además, pidió un amplio acuerdo entre diversos sectores de la sociedad para escapar de la crisis y habló del estado de su gremio en medio de la pelea judicial que mantiene con Luis Barrionuevo.
—¿Qué visión posee de la situación?
—Muy negativa, hay un descontrol en todo sentido, no se ven políticas para controlar este nivel de precios. Camino por la calle y los valores de alimentos son un disparate, el dólar por las nubes. Así no se puede vivir. Esto me hace acordar a la situación que vivimos con la hiperinflación de 1989. Con el agravante de que tenemos un gobierno totalmente descompuesto, que vive en peleas, que no demuestra confianza, que se enfoca en ideologías anticuadas. El ejemplo es la pelea entre Juan Grabois y Sergio Massa, son del mismo gobierno. Por eso digo, vivimos es un país de locos, con incompetencia y corrupción. Se perdieron el orden y la moral, estamos muy mal.
—¿Hay salida?
—Sí, por supuesto. Tienen que existir acuerdos importantes entre todos los sectores. Es momento de que todo el gremialismo se enfoque en discutir salarios y paritarias, que gracias a la inflación están por el piso. Solo alcanza con preguntarle a la gente. Tenemos que hacer un sistema coparticipable para la política y los gremios.
—Usted apoyó la precandidatura a presidente de Miguel Pichetto por Juntos por el Cambio y estuvo presente, como orador, en el acto de lanzamiento. ¿Por qué?
—El acto realmente estuvo muy bueno, asistieron miles de personas que fueron hasta el club Ferro por su propia voluntad. En principio, a Pichetto lo conozco desde hace muchos años, es un dirigente muy razonable y que a lo largo de toda su trayectoria mantuvo coherencia. No es que un día dijo una cosa y después entró en contradicción. Además, tiene las ideas que el país necesita para avanzar, lo valoro mucho.
—¿Cómo está el gremio?
—Muy bien por suerte, con gestión. El afiliado nos devuelve la confianza día a día. Más allá de las locuras de Luis Barrionuevo, con sus demandas judiciales insólitas, vemos qué pasa con las elecciones de delegados. Y la realidad es que La Lista Gris gana en todos lados.