La Unidad de Información Financiera (UIF) presentó un escrito ante la Justicia avalando la versión del jefe de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), investigado por su supuesto nexo con uno de los operadores financieros del Lava Jato, Leonardo Meirelles, condenado por transferir millones de dólares en sobornos.
La UIF informó al juzgado federal de Rodolfo Canicoba Corral que “no cuenta” con reportes o información de inteligencia, local o internacional, que “vincule” a Arribas con el Lava Jato, Odebrecht ni las empresas que se asociaron a la constructora brasileña en el soterramiento del Ferrocarril Sarmiento: Iecsa –de Angelo Calcaterra, primo del presidente Mauricio Macri–, Ghella y Comsa. Así consta en un escueto informe, según pudo reconstruir PERFIL de fuentes con acceso a la causa. El escrito del organismo antilavado fue presentado luego de un pedido del juez subrogante, Ariel Lijo, y después de que el fiscal Federico Delgado imputara a Arribas y solicitara una inspección en la UIF para constatar qué información tiene sobre el jefe de la AFI. Cuando el nexo entre Arribas y Meirelles salió a la luz, La Nación informó que el organismo había recibido una alerta de lavado contra el funcionario en abril, y que no lo había denunciado. La UIF lo negó en un comunicado.
La presentación de la UIF llegó rápidamente a la Justicia. El organismo antilavado del Poder Ejecutivo dijo que consultó a sus pares de otros países y que “por el momento” no habría información sobre Arribas. Además, afirmó que de acuerdo con la información a la que accedieron, “sólo se habría procesado” uno de los cinco pagos que Meirelles habría transferido desde la cuenta de una offshore a la cuenta de Arribas en el banco Credit Suisse, en Suiza. De esta manera, el organismo sostuvo la versión de Arribas.
Delgado pidió unas nueve medidas y la principal es la declaración testimonial del cambista Leonardo Meirelles.
Tras la denuncia de la diputada Elisa Carrió, Delgado pidió que Arribas sea investigado por la revelación de La Nación. El artículo informó que Meirelles transfirió un total de US$ 594.518 a través de cinco giros desde una cuenta en Hong Kong a otra en Suiza a nombre de Arribas entre el 25 y el 27 de septiembre de 2013, justo cuando se reactivaban las obras de soterramiento del tren Sarmiento adjudicadas a la empresa Odebrecht, para la que Meirelles trabaja de manera informal. Su función era gestionar el pago de coimas.
Arribas sólo reconoce una de las cinco transferencias, la del jueves 26 de septiembre de 2013, por US$ 70.500. Primero dijo que fue por la venta de un inmueble, luego por muebles. El dinero partió de la cuenta bancaria de una sociedad controlada por Meirelles, RFY Import & Export Limited, calificada por la Justicia brasileña como “empresa de fachada” destinada al pago de coimas, lavado de activos y evasión.
Arribas no es el único expediente sensible para el Gobierno en esa fiscalía. Es el mismo equipo que interviene en Panamá Papers y en el caso Angelici, junto con el juez Sebastián Casanello. En el primero, Delgado imputó a Macri, a su padre Franco y a sus hermanos Mariano y Gianfranco por presunto lavado de dinero en una offshore en Brasil. En el segundo, investiga si Daniel Angelici, amigo del Presidente, traficó influencias en la Justicia.