La Cámara de Diputados se metió de lleno en la crisis política que atraviesa el Frente de Todos. Con discursos que por momento fueron más reflexivos y por momentos más críticos, la oposición le dio la extremaunción al Gobierno. El bloque oficialista, por su parte, convocó a militar la esperanza.
“Han triturado la confianza”, gritó Mario Negri, jefe del bloque UCR. Insistió que se trata de “un gobierno con incertidumbre, que además de ser débil se pone al borde del precipicio”. “Resuelvan las intrigas del palacio adentro del palacio”, indicó y enfatizó: “No venimos a empujar a nadie, pero no se empujen entre ustedes”.
En el pasillo que une la Presidencia de la Cámara con el recinto, uno de los armadores de Juntos por el Cambio destacó en diálogo con PERFIL que “fue bueno el comportamiento de Juntos por el Cambio”. “Nos ayudó el silencio de (Gerardo) Morales, Patricia (Bullrich) esta vez se limitó a un tuit y Mauricio (Macri) se fue de viaje”, explicó. “Nosotros teníamos que comprar pochoclos y esperar”, agregó.
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Mario Negri: “No venimos a empujar a nadie, pero no se empujen entre ustedes”
En una sesión que estaba prevista desde la semana pasada, con Martín Guzmán en el Palacio de Hacienda, el debate empezó con un bloque de expresiones políticas que Sergio Massa acordó en Labor Parlamentaria con los bloques opositores. Por el PRO hablaron Luciano Laspina y Cristian Ritondo.
“Nos prometieron que nos traían al joven maravilla, y la verdad que sometieron a la Argentina a un caos que se fue profundizando”, comenzó este último. También planteó que en el que las principales figuras que habían hecho una alianza, mostraron su fracaso como Gobierno.
“Mientras se pelean todos los días más de tres mil argentinos entran en la pobreza, despiden a sus hijos en Ezeiza, muchos chicos dejan de ir a la escuela. Dejen de pelearse pongan lo que hay que poner”, destacó el ministro bonaerense.
“Nos prometieron que nos traían al joven maravilla, y la verdad que sometieron a la Argentina a un caos que se fue profundizando”, Cristian Ritondo
Por su parte, Luciano Laspina enfocó su discurso en la cuestión económica. “Asistimos al final de un largo ciclo de populismo, que destruyó las bases del crecimiento económico, son 20 años de desaciertos q nos llevaron a esta situación crítica”, dijo el santafesino. Pero también dejó un mensaje hacia adentro de la interna de Juntos por el Cambio: “No podemos caer en el diagnóstico fácil de que lo que vemos es simplemente el resultado de una crisis política, es mucho más profundo eso se pudo resolver en la cena de anoche”.
Con esta definición, el economista de confianza de Mauricio Macri quiso sentar postura. La intención era mostrarle a los moderados de Juntos por el Cambio que para llegar al gobierno en 2023 tienen que terminar con el “gradualismo” y la “moderación”. Hace un tiempo Laspina, en línea con Macri, plantea la necesidad de aplicar políticas de shock.
La defensa del oficialismo
El Frente de Todos dividió su defensa en tres. Primero lo hizo la ex gobernadora de Tierra del Fuego Rosana Bertone. La fueguina defendió la reactivación económica de las distintas regiones del país: “Las provincias argentinas no están ni cerca de la realidad, veo pleno empleo, crecimiento industrial turismo activo, vuelos llenos. Esa es la actividad en las provincias de la Patagonia”.
La otra fue Blanca Osuna que se encargó de cargar contra la gestión cambiemita, particularmente con la educación como eje: “El macrismo destruyó el sistema educativo, cambió sus leyes y desfinanció todo el sistema”. “Hay una irresponsabilidad de la oposición de no querer asumir el rol que les toca, no es dejar críticas, es dejar los intereses nacionales por sobre los que ellos representan, claramente representados por la oposición”, comentó.
Martínez convocó a defender la esperanza en el país
El cierre estuvo a cargo del jefe del bloque, Germán Martínez, que llegó a ese lugar el 1 de febrero en la última gran crisis pública que tuvo el Frente de Todos, cuando Máximo Kirchner renunció a ese puesto. El hijo de la vice estuvo ausente en la sesión.
“Tenemos que levantar la autoestima de nuestro pueblo, eso lo logramos no acallando voces, sino cumpliendo con la humilde tarea de representación para que podamos tener una Argentina cada vez más grande”, cerró su discurso el santafesino. Un rato antes planteó que la tarea de los legisladores “es ser constructores de esperanza en el seno del pueblo argentino”. “Cuando tienen el autoestima por el piso aprovechan las corporaciones para imponer las reglas del juego”, destacó.
