Una de sus tareas como jefe de Gabinete de Cristina Fernández de Kirchner era defender lo indefendible. Y Jorge Capitanich no perdió la gimnasia. Ahora como intendente de Resistencia, Chaco, el exfuncionario de Casa Rosada negó que la actual senadora nacional pueda ser culpable de las acusaciones que emitió el juez Claudio Bonadio.
"Se rigen por un principio de la libre convicción, generando pruebas falsas, imputaciones falsas y ataques políticos. Está involucrado un sistema judicial acorde al poder, más el grupo mediático concentrado y corporaciones financieras y mediáticas, merece una reflexión", apuntó el exgobernador en diálogo con FM La Patriada.
"Esto también induce a un proceso de concentración de la obra pública. Las compras gubernamentales se pretenden reservar para empresas multinacionales de origen o norteamericano o europeo cuyas alianzas permiten el exterminio de otras empresas públicas. No cabe la menor duda que se observa una estrategia de carácter general", agregó.
El chaqueño consideró además que "por primera vez en la democracia no hay Estado de Derecho con el abuso de las prisiones preventivas" y dijo que estas causas se arman para "ocultar los grandes problemas de la Argentina que pueden llevar a hiperinflación o dolarización y terminar en el exterminio de la pequeña empresa. Por eso digo que hay que ubicar esto como una estrategia para eliminar opositores y ocultar los problemas económicos".
La última pregunta de la entrevista apuntó a si "puede haber ciertos funcionarios que fueran infieles al gobierno". La respuesta le permitió a Capitanich encontrar, una vez más, culpables: "Puede ocurrir, claramente. Siempre puede ocurrir que en la ejecución de obra pública".
