El socio y mejor amigo del vicepresidente deberá presentarse el próximo 14 de julio en los tribunales civiles para declarar como testigo a favor de Amado Boudou.
La citación de la jueza Patricia Noemí Juárez parece tirar por tierra las versiones de un alejamiento, cortocircuito o pelea entre el funcionario y José María Núñez Carmona, ya que la testimonial fue solicitada a pedido de Boudou.
El vice tiene un juicio por división de bienes iniciado por su ex esposa, Daniela Andriuolo, quien vive en Italia, y es representada por el abogado Eduardo Romanín.
En el juicio, la mujer pide la mitad de los bienes gananciales: un auto Honda Civic –por el que Boudou está siendo investigado– y un departamento valuado en 400 mil dólares. Hace unos años, la abogada del vice en Mar del Plata había solicitado que Núñez Carmona y Juan Carlos “Sordo” López –otro socio y amigo de Boudou– declararan como testigos para confirmar la versión de Boudou: que no tenía bienes gananciales en el momento del matrimonio con Andriuolo. Pero la medida quedó suspendida hasta el 11 de junio pasado, cuando la misma abogada se presentó ante la jueza para pedir que esta vez haga efectiva las citaciones a ambos.
Después de ser indagado el 9 de junio, el vice intentó depositar la responsabilidad de la compraventa de Ciccone en Núñez Carmona durante una entrevista en Palabras más, palabras menos. Pacto y estrategia o cortocircuito son las dos opciones contrapuestas de esta decisión de Boudou.
Núñez Carmona se presentó el martes para ser indagado por el juez federal Ariel Lijo en el caso Ciccone. Anoche, el magistrado lo procesó como partícipe necesario. Nuñez Carmona se había negado a declarar. Dijo a los medios que lo haría más adelante.