Las encuestas son una de las claves de las elecciones, pero no siempre son confiables. En épocas cercanas a los comicios, cuando se multiplican y se difunden por medios y redes sociales, surge el debate: ¿cómo saber si un sondeo es representativo? El problema es que muchas de ellas no son confiables en términos metodológicos, por lo que todo análisis en base a sus resultados puede resultar equívoco. Con ese fin crearon la Guía Ciudadana de Opinión Pública, una plataforma creada por el Colegio de Sociólogos de la Provincia de Buenos Aires (CSPBA), para "evaluar la veracidad" de los sondeos de opinión en contexto electoral.
Pedro Damián Orden, presidente del CSPBA y coordinador general del proyecto, contó a PERFIL cómo idearon la iniciativa, que se gestó en el Núcleo de Innovación Social con un equipo de trabajo que está enfocado en el desarrollo tecnológico.
"Veíamos que nos llegaban encuestas ‘livianas’: sin referencias, sin fechas técnicas. Recibimos muchos llamados de periodistas con consultas de si algunas estaban bien hechas o no, y muchas de esas encuestas no cumplían con requisitos metodológicos", explicó. Para Orden, hay un consenso teórico de que las encuestas "construyen más de lo que registran".
La guía se enfoca en condiciones científicas clave que deben cumplir las encuestas para ser confiables
¿Cómo funciona?
El usuario interactúa con un formulario con diez campos que hay que completar y que se enfocan en condiciones científicas clave que deben cumplir los estudios para ser confiables en términos metodológicos. Las preguntas indagan, por ejemplo, si en la encuesta se explicita el método utilizado (online, telefónico, presencial), la fecha del sondeo, y si la población consultada está aclarada. El proceso se realiza en su web (prometen confidencialidad en el manejo de los datos) y quien ingrese debe completar los diez campos. Esta información se aloja en una base de datos no estructurada.
"Esto permite que nosotros podamos hacer pruebas con motores de machine learning para ver qué actores, palabras o números pudieran estar incurriendo en algún sesgo", dijo, y aclaró que los datos son tomados en forma confidencial de acuerdo a la Ley Nacional de Datos Personales 25.326. En términos de respuesta es inmediato, y se ve al finalizar las preguntas y enviar la información. Allí arroja un puntaje de 0 a 20, dividido en 4 categorías: "Óptima", "Muy confiable", "Poco confiable" y "Para nada confiable".
Entre el cuestionario que hay que responder, el sociólogo y docente de la UBA destacó que hay al menos tres preguntas que pueden ser determinantes a la hora de clasificar el relevamiento en una u otra categoría. "El método de recolección (si es telefónica, presencial u online) es algo que define, porque muchas veces los instrumentos sesgan las respuestas", detalló.
El muestreo también es clave, porque habla de la representatividad del grupo tomado para el cuestionario. “Si tomo todos los casos de los vecinos de mi edificio va a ser representativo sólo de ese lugar”, pone a modo de ejemplo para ilustrar que no siempre el número de casos es determinante.
Por último, es importante que la encuestadora que realizó el estudio sea una empresa registrada en la Càmara Nacional Electoral (CNE). "Esto habla de una empresa que se ajusta a la ley", agregó. La idea, contó Orden, es generar un recurso pedagógico en aulas y espacios colectivos de reflexión, principalmente en instancias formativas, sin dejar de apuntar a la ciudadanía en general.
Desde el Colegio de Sociólogos no descartan asociarse a otras iniciativas que se dedican al chequeo de posibles fake news que circulan en las redes y en ocasiones llegan a los medios. En términos de alcance y datos recabados, esperan tener un primer informe días antes de las PASO, y destacan que los datos serán de acceso abierto.
Cómo se hacen y cuánto cuestan las encuestas que influencian las elecciones
¿Cómo influyen las encuestas?
Las encuestas, analizó el presidente del CSPBA, “son parte de la comunicación política en tiempos de elecciones, más allá de ser una foto de un momento determinado”. "Muchas veces sin interés específico del consultor, la política se vale de resultados o proyecciones para negociar o posicionar opciones", apuntó.
"La encuesta puede forzar la decisión de los indecisos, pero tiene mucho que ver el contexto. La grieta está presente en todos los órdenes de la vida y la encuesta refleja superestructuralmente una forma de ser nuestra: no reconocemos terceras partes, siempre es uno a uno. Hay una cultura de polarizar que es preexistente a la encuesta", cerró Orden.
A.G./F.F.