La provincia de La Rioja está convulsionada con el nuevo escándalo del hijo del gobernador Luis Beder Herrera, Luciano. El joven está acusado de haberle disparado a un custodio de la familia por no encontrarle su perro.
Pese a la confusión en torno al hecho, la diputada Inés Brizuela y Doria dijo a Perfil.com que "el Gobierno debe brindar información al respecto". "Los indicios son muy fuertes", argumentó.
Para la legisladora nacional de la UCR, "el Gobernador tiene dos opciones: reconocer el hecho, con lo cual su hijo debe someterse a la Justicia y quedar preso. O desmentir el hecho. Evidentemente eligió esta opción". Contó además que una vez conocido el hecho, "el policía que denunció no aparece por ningún lado".
Por su parte, el diputado Walter Cruz expresó: "Este chico ya tendría que estar a disposición de la Justicia y hasta ahora nadie hizo nada". Además, adelantó que un grupo de legisladores se reunieron para presentar un pedido de informe en la Justicia.
Operación. Desde el Gobierno provincial, denunciaron una campaña contra el mandatario y su entorno. El ministro de Gobierno, Claudio Saúl, desmintió la versión sobre el acuartelamiento de las fuerzas policiales u responsabilizó a algunos medios de comunicación locales de difundir información errónea y "malintencionada".
Rompió el silencio. El cabo Carlos Oyola habló 30 horas después de conocida la noticia y salió a desmentir el trascendido: "En ningún momento tuve problemas con el hijo del gobernador", destacó a El Show de la Radio.
"No es como dicen los medios que hubo disparos y yo estaba herido", agregó el uniformado. Sin embargo, reconoció que se extravió de la residencia gubernamental el perro del hijo del mandatario, aunque dijo que luego fue localizado.