El ministro de Justicia, Germán Garavano, afirmó hoy que no considera que haya "mayores garantías" en la investigación por la muerte del fiscal Alberto Nisman en el caso que la causa pase al fuero federal.
De todas maneras, pese a haber transcurrido más de un año, el funcionario dijo que la Justicia debería dar un veredicto en los próximos meses sobre las circunstancias del hecho. "Es muy difícil, no tenemos mayores garantías. Es un tema que hace a las competencias de los distintos fueros y al enfoque de la jueza (Fabiana) Palmaghini. Hoy tenemos una Justicia que goza de poca confianza en la comunidad", admitió Garavano en declaraciones a radio La Red.
La semana pasada, la jueza Palmaghini se declaró incompetente para continuar a cargo de la investigación por la muerte de Nisman, y hoy a las 9:30 vence el plazo que tienen las partes de la causa para apelar esa decisión.
El pase al fuero federal ha sido reclamado con insistencia por los abogados de la querella, que representan a la ex mujer del fiscal de la UFI-AMIA, Sandra Arroyo Salgado, y a las dos hijas que tuvo con Nisman.
Garavano aseguró también que no tiene una opinión formada sobre si se trató de un suicidio o un asesinato, y criticó que a más de un año, la Justicia no haya podido despejar esa duda. De todas formas, y pese al paso del tiempo, aseguró que "si no se puede verificar un suicidio, la hipótesis que subyace es la del homicidio", y aseguró que cree que "en los próximos meses la Justicia debiera dar un veredicto en relación, al menos, a las circunstancias del hecho".
Nisman fue hallado muerto con un tiro en la cabeza el 18 de enero de 2015, en el baño de su departamento de las torres Le Parc, en el barrio porteño de Puerto Madero. El arma, calibre 22, se la había facilitado por su asesor informático Diego Lagomarsino.