El embajador argentino en China, Luis María Kreckler, le dijo a PERFIL que nadie lo notificó de un eventual desplazamiento del cargo y que si la versión que trascendió de fuentes oficiales se convirtiera en realidad, tampoco conoce las causas.
“Esto se hace, normalmente, por canales formales. Cancillería notifica a un embajador que será removido. Pero esto no ocurrió”, dijo el embajador vía telefónica desde Beijing. Kreckler será desplazado según dijeron también a este medio fuentes de Cancillería y Presidencia. En las últimas horas, el decreto llegó a manos del jefe de Estado, Alberto Fernández.
Sin embargo, el diplomático desmintió mal desempeño en sus funciones y los rumores acerca de que estaba en una Isla en las afueras de China. “Estoy en Beijing, con mi familia. Lo único que sí pedí fue una licencia ecológica: esta es una ciudad muy contaminada y por regla hay que alejarse 45 minutos para respirar aire puro por dos días, porque sino te enfermás”, indicó.
Las primeras versiones extraoficiales indicaron que el malestar en el Gobierno y sobre todo, del canciller Felipe Solá, estaba vinculado con un mal manejo de Kreckler en relación a las vacunas.
En diálogo con PERFIL, el embajador refutó eso. Contó que tuvo pocas comunicaciones con Solá porque suele dialogar con los ministerios de los que dependen las inversiones en cuestión, más que con el canciller. “Llegué acá en julio. Hace seis meses que estoy. Ya tuvimos dos reuniones con Sinopharma, que es la farmacéutica más grande del mundo, que producirá 1200 millones de dosis y que ofreció para la Argentina 30 millones de dosis y eso se está por cerrar ya”, detalló.
Aclaró, además, que este tipo de trascendidos extraoficiales generan incertidumbre en China, país en el que él representa a la Argentina, en medio de negociaciones clave.
Contó que también está trabajando en las posibles inversiones pospandemia de China para Argentina, desde la reactivación de las represas Cepernic y Néstor Kirchner en Gallegos a la inyección de dinero para el ferrocarril Belgrano Cargas y el San Martín.
“De todo esto están al tanto tanto el Ministerio de Salud como el Ministerio de Asuntos Estratégicos”, manifestó. Kreckler se mostró sorprendido al ver la noticia de su posible desplazamiento en los medios. “Estoy sorprendido de que se diga esto de que estoy en una Isla en plena negociación por las vacunas”, afirmó.
“He dado 37 años de servicio al país, no me gusta que manchen mi nombre”, explicó. El diplomático es histórico de Cancillería. Fue embajador en Brasil, Alemania, Suiza y desde julio, en China.
MC