El jefe de Gobierno porteo Horacio Rodríguez Larreta señaló este jueves 18 de agosto los "cuatro pilares" necesarios para transformar la Argentina. Fue ante la atenta mirada de un centenar de los empresarios y líderes económicos más importantes del país en el Council of The Américas.
En un claro tono de campaña de cara a las elecciones presidenciales del 2023, el funcionario habló de "estabilizar la economía, generar un shock de confianza en la comunidad internacional, defensa irrestricta de los valores democráticos y tener visión federal".
Tras escuchar al presidente de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios, Mario Grinman, y a la presidenta del Council of The Américas, Susan Segal, el mandatario tomó la palabra y repartió agradecimientos. No tardó en señalar la necesidad de "insertar a la Argentina al mundo de manera inteligente", lo cual calificó como "un desafío urgente".
Al desarrollar el primero de los cuatro "pilares", el mandatario porteño dijo que para poder planificar de cara al futuro hay que estabilizar la economía. "Para abrir mercados, sostenerlos en el tiempo y atraer inversiones necesitamos una economía estable", dijo.
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Además de señalar el problema de la inflación y de pronosticar la estadística anual en torno a las tres cifras, Larreta habló de las variables macroeconómicas. Dijo que "tenemos que apuntar a un solo tipo de cambio que sea competitivo, que nos permita tener la producción en marcha". También subrayó como meta "lograr el equilibrio fiscal" y "aflojar la presión impositiva insostenible que padecen quienes producen".
"Necesitamos generar un shock de confianza"
Con esa frase, el jefe de Gobierno porteño buscó hablarle a la comunidad internacional. En esa línea llamó a recomponer la relación con Brasil y que no dependa de las "trabas ideológicas", al tiempo que manifestó: "Hay que darle más vitalidad al Mercosur".
"Brasil es nuestro principal socio comercial, no puede ser que la afinidad dependa del color político de cada país porque son trabas ideológicas que complican la relación", dijo.
Parado desde un estrado en uno de los laterales del salón de conferencias del Alvear Palace Hotel, el funcionario miró de frente a empresarios como Cristiano Rattazzi, de la Unión Industrial Argentina (UIA), Gustavo Weiss de Eleprint y la Cámara Argentina de la Construcción, Juan Martín Bulgheroni (Pan American Energy) y dirigentes como el embajador argentino en Washington Jorge Arguello y su par americano en el país, Marc Stanley.
"Tenemos que darle más vitalidad al Mercosur, que hoy apenas tiene 11 acuerdos de libre comercio con países que representan el 10% del PBI global", trazó. Y sumó: "Hay que trabajar para ratificar el vínculo entre el bloque y la Unión Europea".
Para el jefe de Gobierno porteño y uno de los principales dirigentes opositores con posibilidades de llegar a la Casa Rosada el año que viene esa política tiene que hacerse "de manera inteligente" con otros lineamientos como "terminar de concretar el ingreso de Argentina a la OCDE, que avanzó con el Gobierno anterior pero ahora se frenó".
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Eso "sería una señal de confianza al mundo enero que todos valorarían, y nos obligará a adoptar standards de primer nivel en materia de políticas públicas", según comentó.
Defensa de valores democráticos y visión federal
Los últimos dos conceptos que atravesó Larreta en su discurso ante la parte de la comunidad empresaria argentina estuvieron más enfocados al terreno local. Aunque llamó a condenar enfáticamente los Gobiernos de países como Cuba, Venezuela y Nicaragua, a los que calificó como "violatorios de los Derechos Humanos", también habló del narcotráfico en Argentina.
"La triple frontera es un lugar caliente que hay que vigilar con mucha vehemencia porque el terrorismo y el narco rompen con la paz", marcó.
El dirigente también habló del "avance narco" en la ciudad de Rosario, lo que situó como "una muestra de lo que puede generar en la sociedad" porque "es algo que ya excede a rosarinos y santafesinos, y que se ha convertido en un problema de seguridad nacional". No se olvidó de incluir entre sus preocupaciones a "las amenazas a la propiedad que sufren las personas en la Patagonia".
Como último eje, Larreta le señalo a los empresarios presentes en el salón Versailles del hotel palaciego que "hay que reconstruir el federalismo porque tenemos la ventaja de la diversidad, lo que requiere una política diversa".
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Apuntó que "la ganadería pampeana podría estar produciendo más" y ratificó su idea de "transformar Vaca Muerta en una política de Estado", luego de hablar del potencial que tiene el país en el contexto de la guerra entre Rusia y Ucrania y la crisis mundial de alimentos y energía.
Antes de retirarse por una puerta lateral sin saludos ni respuestas a las preguntas de la prensa, Larreta cerró su discurso con dos párrafos dedicados a la construcción política que proyecta. "La única manera de avanzar en serio es construyendo un consenso más amplio que nos permita ejecutar las transformaciones profundas que necesita el país", afirmó sin precisar a quiénes o qué actores convocaría.
Y completó: "El próximo Gobierno de la Argentina tiene que ser un verdadero Gobierno de coalición que marque un punto de inflexión".
