POLITICA
BOLSILLOS ESTRESADOS

Inflación Fernández: hasta junio acumula un piso de 500 por ciento

El jueves próximo el Indec difundirá la medición del mes pasado, que según la última encuesta que realizó el Banco Central entre las consultoras, fue de 7,3%. Contando, incluso, un punto menos que eso, desde enero de 2020 hasta el mes pasado los precios habrán aumentado más del 500%. Eso golpea en alimentos y en los costos de la vivienda y deja afuera del sistema a muchos argentinos, en especial niños y jubilados. Aun con desaceleración recrudece la tensión sobre la manera en que podrá desinflarse la canasta alimentaria.

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Camilo Tiscornia (C&T), Natalia Motyl (NM), Salvador Vitelli (Romano Group) y Santiago Manoukian (Ecolatina). | cedoc

El Indec dará a conocer el próximo jueves 13 de julio el IPC de junio, que será el último dato oficial con el que el oficialismo llegará a las PASO, y el segundo mes consecutivo en que desaceleraría el índice. En caso de que arrojara un 6%, la primera mitad del año acumularía un 50% y, desde el comienzo de la gestión del Gobierno, un 503%.

Las estimaciones privadas relevadas por el REM del BCRA prevén que sea del 7,3%. De ser el caso, desde enero de 2020, cuando mensualmente dio 2,3%, se habría acumulado una suba de precios del 509%, precisó a PERFIL Santiago Manoukian, asesor económico de Ecolatina.

Es decir, los precios se sextuplicaron en promedio.

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De acuerdo con los datos oficiales hasta mayo, en enero de 2020 el kilo de pan flauta costaba $ 111 y en el quinto mes de este año, $ 615. Por su parte, en ese entonces el litro de leche salía $ 55 y los 500 gramos de yerba, $ 106, actualmente estos productos valen $ 293 y $ 540, respectivamente.

En cuanto a la carne, el kilo de asado costaba al principio del Gobierno $ 320 y en mayo de 2023, $ 1.808. En tanto, 1 kg de nalga tenía un valor de $ 383 y de acuerdo con el dato del Indec, en el sexto mes de este año se vendía a un precio de $ 2.340. Otro corte que aumentó considerablemente fue el cuadril, que pasó de $ 368 a $ 2.184.

Inflación de los últimos 12 meses

Los distintos economistas consultados por PERFIL coinciden en que esta situación se debió en gran medida a la profundización de algunos desequilibrios macroeconómicos, como la emisión monetaria, el déficit fiscal y mala praxis cambiaria, que no pudieron anclar expectativas durante este período, el cual comenzó en medio de una pandemia.

Para Natalia Motyl, economista de NM, “los primeros meses de la gestión de Alberto Fernández fueron clave en materia de política monetaria. Se expandió la base monetaria en un intento de amortiguar el impacto de la pandemia”.

Por su parte, Camilo Tiscornia  complementó que el Gobierno tuvo un déficit fiscal bastante importante. “En el año 2020 fue 8,4% del PBI, año de la pandemia, en 2021 bajó a 3,6%, en 2022 4,2% y este año vamos para otro valor bastante más grande que ese”, sostuvo.

En tanto, Salvador Vitelli, jefe de research de Romano Group, analizó: “El acuerdo con el FMI actuaba como ancla de expectativas, como meta, pero comenzó a quedar desvirtuado e hizo que aquello donde se anclaban las expectativas ya directamente deje de existir. Por ende el escenario se volvió cada vez más adverso, haciendo que hoy estemos hablando de estos niveles de inflación tan abultados”.

Inflación: ¿Qué se espera para el segundo semestre?

Shocks. Cada pico inflacionario de estos últimos tres años y medio dejó la inercia inflacionaria en un piso más elevado. El impacto del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania que comenzó en febrero de 2022 tuvo sus implicancias inmediatas para la subida de los precios mundiales de la energía y los alimentos.

El impacto en Argentina se vio reflejado cuando el rubro de alimentos y bebidas tocó un máximo de 13,2% en abril de ese año. En marzo del año pasado, Alberto Fernández declaraba “la guerra contra la inflación”. El IPC de ese mes arrojó un 6,7%.

Hasta entonces, la inflación se movió en torno al 3,4% mensual promedio en 2021.

Luego siguió la renuncia del exministro de Economía Martín Guzmán y el fugaz paso por el Palacio de Hacienda de Silvina Batakis. Este cimbronazo decantó en el 7,4% de julio de 2022, la más alta hasta entonces.

La Canasta Básica de Alimentos alcanzó los $102.266,27 y aumentó un 60% en lo que va del año

El desembarco de Sergio Massa en el ministerio llevó cierta calma inicial. Sobre todo se notó en la calma del dólar blue, que llegó a cotizar por encima de los $300 con la expulsión de Guzmán de la cartera de Economía.

Sin embargo, la sequía de este año, sumada a la inestabilidad política producto de las internas dentro del oficialismo que conllevó una corrida cambiaria que elevó el tipo de cambio paralelo a rozar los $ 500, provocó que la inflación del cuarto mes de este año sea del 8,4%, la más alta para un valor mensual desde abril de 2002 y de manera interanual desde 1991, tras las salida de la convertibilidad.

Resto del año. De acuerdo con el REM, las proyecciones de inflación para lo que queda de 2023 son: julio 7,6%, agosto 7,5%, septiembre 7,8%, octubre 7,8%, noviembre 8% y diciembre 8,5%.

Con un piso del 6% mensual hasta diciembre, Alberto Fernández dejaría la presidencia al siguiente presidente una inflación acumulada de más de 750%.

 

La pobreza ascendería al 43%

R.P.

Durante la primera mitad del año, el aumento en el valor de la canasta básica total, muy por encima de los incrementos en los ingresos familiares, habría dejado un saldo de 1 millón de nuevos pobres en Argentina.

Tal como reflejó ayer PERFIL, y según las estimaciones de la Universidad Católica y la Di Tella, los altos índices de inflación dejarán a 12,5 millones de personas bajo esta condición. Según el último dato del Indec, hasta ahora son 11,5 millones.

El próximo número oficial se conocerá recién en septiembre, después de las PASO.

La canasta básica total superó el 70% de incremento en el primer semestre de este año, mientras los ingresos familiares lo hicieron 20 puntos menos.

En este panorama, los más perjudicados son los niños. Mientras la indigencia alcanzó al 8,1% de la población durante el tercer trimestre de 2022, en el grupo de niños y adolescentes esta cifra ascendió al 13,1%.

El último informe del Indec señala que el 54,2% de las personas de 0 a 14 años son pobres.