El miércoles la información oficial del Ministerio de Trabajo arrojó resultados laborales muy malos en la Argentina: El índice de empleo privado formal cayó 0,3% en octubre de 2018 en relación a septiembre, y se redujo 1,6% en la comparación interanual. A la falta de empleo se suma una inflación que el gobierno del presidente Mauricio Macri no supo detener desde que asumió y en 2018 el alza de precios será récord desde el 2002.
El mismo día, el Boletín Oficial ofreció otra noticia polémica. El Gobierno autorizó aumentos de hasta 66% en peajes para compensar a las empresas por la devaluación. Es decir, es muy difícil para Cambiemos ofrecer buenas noticias económicas.
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En este contexto, la agenda internacional vuelve a ser una salida temporal para que Macri respire. El jefe de Estado se siente a gusto cuando "sale al mundo" y solo recibe elogios. Todo Cambiemos vuelve a mostrarse exultante con este tipo de eventos, como si se tratara del mundo ideal para la gestión.
El G-20 aún no comenzó de manera oficial y el líder del PRO ya recibió mensajes de apoyo. Desde Gran Bretaña, Theresa May, dialogó con Clarín: “Vemos a Argentina como un socio clave”, señaló. "Yo diría que argentinos, británicos e isleños se benefician todos cuando el Reino Unido y la Argentina trabajan en conjunto", agregó.
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Christine Lagarde, titular del FMI, también dejó frases que fueron música para los oídos de Cambiemos desde los Estados Unidos: “El programa está funcionando y ha estabilizado a la economía argentina. Estamos muy orgullosos y nos sentimos privilegiados de apoyar a Argentina. Comenzaremos a ver un desarrollo positivo del programa en el segundo trimestre de 2019", disparó.
Por último, Emmanuel Macron, de Francia brindó una conferencia de prensa y avisó: “Habrá muchos progresos que vendrán en el futuro". Además, resaltó “las medidas que están aplicando con mucha firmeza”.
Los elogios seguirán hasta el domingo. Los diarios del fin de semana analizarán los resultados del G-20. El Gobierno se mostrará feliz y proactivo. Macri dirá que el cambio ya se siente. El lunes volverá a la realidad. Esa misma a la que busca escaparle. Al menos por unos días.
