Tras el decreto por el cual se extendió el aislamiento para enfrentar el coronavirus y habilitó a los gobernadores a solicitar su flexibilización en los territorios que comandan, son pocos los jefes provinciales que ya hicieron pedidos formales. En su mayoría, evalúan con cautela los levantamientos mientras analizan los posibles protocolos sobre el accionar en caso de avanzar con la reapertura de algunas actividades.
Entre el domingo y el lunes, el ministro del Interior, Eduardo “Wado” De Pedro habló con 9 gobernadores. Todos coincidieron en seguir el camino del Gobierno nacional que decidió extender el aislamiento preventivo, social y obligatorio hasta el 26 de abril con pocas flexibilizaciones. Otros jefes provinciales se comunicaron con el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero con el mismo argumento: son pocas las actividades que están dispuestos a controlar para que retomen el ritmo habitual. Algunos de ellos ya le hicieron algunos pedidos concretos.
Cafiero fue el encargado de recolectar esas solicitudes formales. Al finalizar el lunes en la Casa Rosada llevó esas demandas a la Quinta de Olivos para analizarlas junto al Presidente. Hasta ahora, solo hubo requerimientos de actividades ya que ningún gobernador solicitó la flexibilización por zonas geográficas o localidades. Incluso, los requerimientos formales no llegan a abarcar la mitad de las provincias de la Argentina.
Cuáles son las 48 actividades esenciales exceptuadas durante la cuarentena total
“A nadie le conviene pasarse de vivo. Esto lo entienden los gobernadores que saben que serán responsables de lo que suceda en sus territorios y los empresarios que pueden abrir mañana y tener que cerrar en unos días por contagios”, evaluó un importante funcionario del Gobierno nacional.
Muchas de las consultas de los gobernadores al Ejecutivo nacional en estos días tienen que ver con averiguaciones sobre los protocolos que deben presentar en caso de requerir el retorno de alguna actividad. El DNU por el que se extendió el aislamiento hasta el 26 de abril estableció que con el requerimiento por escrito de las excepciones del aislamiento “se acompañe el protocolo de funcionamiento correspondiente, dando cumplimiento a las recomendaciones e instrucciones sanitarias y de seguridad nacionales y locales”.
“Hay dudas técnicas sobre si tienen que implementar normas de salud o laborales en estos protocolos”, explican en la Casa Rosada. Antes de hacer el pedido formal, los Gobernadores deben asegurarse poder garantizar el cumplimiento de estos documentos.El análisis de cada caso y el armado de los protocolos necesarios podrían llevar a que la “cuarentena administrada” comience recién a regir en la mayoría de las provincias a partir del 26 de abril cuando comience una nueva fase del aislamiento.
Tal como anticipó PERFIL, los gobernadores estudian mínimas flexibilizaciones e implementarán mayores controles al tiempo que aumenten la cantidad de contagiados. La reactivación de la producción de yerba mate, la actividad forestal y los aserraderos en Misiones; la producción de los ingenios azucareros en Tucumán; más servicios con delivery en Neuquén; y reincorporación de frecuencias de vuelos en Tierra del Fuego, son algunas de las evaluaciones de los jefes provinciales. En el territorio bonaerense, el gobernador Axel Kicillof pretende que esta semana transcurra de la misma manera que avanzaron las primeras semanas de cuarentena por lo que cualquier apertura será más adelante, siempre y cuando no involucre al conurbano en donde, por la cantidad de habitantes, espera seguir con un estricto cumplimiento de la medida nacional. El jefe de Gabinete, Carlos Bianco, adelantó que hay 58 distritos de los 135 que no registran casos de coronavirus en los que podría haber modificaciones aunque aclaró que cada caso se estudiará “sin ninguna urgencia”. Esto está lejos de convertirse en un pedido formal a la Casa Rosada.
El gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá dividió la provincia en colores según los niveles sanitarios con la posibilidad de habilitar actividades que hoy se encuentran restringidas en las zonas de menor contagio. La Cámara de Comercio, Industria y Producción le solicitó un horario de atención corrido de 9 a 17, con una mínima cantidad de empleados rotativos, con prioridad de venta de cercanía para evitar aglomeraciones y permisos de ventas por delivery y en forma online que será evaluado. Hasta ahora, esta propuesta tampoco llegó al Gobierno nacional.
MC