El violento clima que se vivía esta tarde en los alrededores del Congreso de la Nación, por la acción de manifestantes opositores que lanzaban piedras y quemaban contenedores de basura generando la consiguiente represión policial, dentro del Parlamento el ambiente también era de extrema tensión, y algunos legisladores hasta llegaron a amenazarse con dirimir las cuestiones personales a golpes. Así, mientras desde la vereda opositora se exigía al oficialismo que "suspenda la sesión por los gravísimos incidentes y la represión policial", las discusiones con el presidente de la Cámara Baja Emilio Monzó en casos eran a los gritos, y a esa altura de la tarde la diputada Elisa Carrió difundió un par de tuits en su cuenta personal que generaron de inmediato amplio rebote en las redes, ya que rechazó que hubiera represión en las calles, sino "dispersión con hidrantes ante la destrucción de bienes públicos".
En el primero de esos mensajes, Carrió destacó que la actuación policial había sido "absolutamente legal", afirmando que "el Frente para la Victoria (FPV) atentaba contra la democracia al impedir el funcionamiento de la Cámara (de Diputados)":
Enseguida, otro mensaje de la titular de la Coalición Cívica reafirmó la línea del tuit anterior, insistiendo en que los incidentes en las afueras del Congreso "no habían sido represión", al tiempo que sostenía que la Justicia, a través de algún fiscal, debía actuar "en forma inmediata" ante "la destrucción de bienes públicos por parte de los manifestantes".
Y el cierre de las reacciones en redes de Carrió a los serios incidentes en Congreso incluyó luego un video de los gritos y las nerviosas discusiones que se produjeron en el recinto, entre diputados opositores que querían que se suspensa el tratamiento del Presupuesto 2019, mientras desde el lado oficialista trataban de seguir adelante con la sesión:
H.B.