Pese a que desde el entorno del presidente Javier Milei aseguraban hasta la tarde del jueves que la denominada Ley Ómnibus no iba a contar con modificaciones de ningún tipo, a las 17 horas una comitiva de la Casa Rosada, integrada por el ministro del Interior Guillermo Francos y Santiago Caputo se trasladaron a la Cámara de Diputados para escuchar a las principales espadas legislativas de la oposición. ¿El objetivo? Realizar concesiones para que la iniciativa tenga dictamen lo antes posible y que se sancione antes del paro de la CGT.
Francos, Caputo y Martín Menem, el presidente de la Cámara baja, tomaron contacto con la oposición más dialoguista, encarnada en el PRO, en el bloque Hacemos Coalición Federal que conduce Miguel Ángel Pichetto y la Coalición Cívica de Elisa Carrió. Aunque, según pudo saber PERFIL, no hubo comunicación con la Unión Cívica Radical y Rodrigo De Loredo, principal referente del espacio.
Mientras Milei retorna de Davos, Suiza, hay un sector de la Casa Rosada que ante este medio resiste a denominar el intercambio con la oposición como “negociación” por un motivo: en la administración de La Libertad Avanza no tienen contrapropuestas, solo, dicen, que aparecen abiertos a recibir “mejoras” para “enriquecer” un texto que el jefe de Estado presentó como “no negociable” aunque transmitió que quiere que los tiempos de discusión se aceleren.
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En ese marco, el Gobierno aparece dispuesto a ceder en el capítulo fiscal, sobre todo en los artículos de retenciones a las economías regionales que fueron criticados. La idea es que los diputados opositores conozcan de primera mano los puntos a modificar y den el visto bueno. La reforma previsional que plantea la normativa de la Ley Bases también podría sufrir cambios porque no hay visto bueno en torno a los aumentos discrecionales del Poder Ejecutivo. Una versión que corrió es que el ministerio de Economía estaría dispuesto a que las jubilaciones se actualicen al ritmo inflacionario aunque del lado de Luis Caputo no quisieron brindar precisiones sobre el tema y guardaron silencio.
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En el paquete, entran en juego otros puntos como la delegación de facultades y la desregulación de industrias importantes, que ya tuvieron el rechazo de gobernadores, tal como lo han manifestado púbicamente en las últimas oportunidades. Desde el Gobierno respondieron en su momento que había errores de redacción dispuestos a ser modificados.
La fecha, sin punto de acuerdo
En el oficialismo no hay acuerdo sobre la fecha que podría existir dictamente. Del lado de Menem le indicarn a PERFIL que todo estaba dado para que sea este viernes y con sesión el sábado. Pero José Luis Espert, el presidente de la comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados, tuvo que salir a señalar que esas chances son mínimas, y que el “escenario más probable es que se sesione la semana que viene".
“El escenario menos probable es que se sesione el fin de semana, mientras que el más probable es que se sesione la semana que viene. El escenario más probable es tener dictamen lunes o martes”, indicó. En declaraciones radiales, el diputado nacional de Avanza Libertad, que funge como aliado del oficialismo, reconoció que "aún falta" más tiempo dado que se están “esperando del Ejecutivo la devolución de las sugerencias que han hecho diputados” de la oposición amigable.
CP
