Se ve competitivo. E incluso se imagina ganando las PASO de la Ciudad dentro de Juntos por el Cambio. Acaso por ello, Ricardo López Murphy está convencido de que será una buena opción electoral en la pelea por la jefatura de Gobierno porteño. En ese marco, el Bulldog decidió hacerse a un lado esta semana de las internas que se iban a dar el 4 de junio con el partido Republicanos Unidos contra el legislador Roberto García Moritán, que lo llevó a una banca de diputados en 2021, y ya dialoga con otros partidos para estar en la boleta sin una interna de por medio.
Así, el martes en su oficina en la calle Suipacha, López Murphy recibió al exdiputado por la Ciudad, Oscar Moscariello, del Partido Demócrata Progresista. Charlaron animadamente. Y es casi un hecho que será el sello que tenga el economista para jugar.
El escenario de elecciones concurrentes con urnas separadas de las nacionales siente que es un sistema perfecto para él. “Estoy recién arrancando, y tenemos un piso de más de diez puntos”, reflexionó ante sus colaboradores. Aún no hay una campaña en vía pública, no hay afiches ni una estrategia electoral en redes sociales. Y sin embargo, en el equipo del Bulldog vieron encuestas donde puede alcanzar el 15%. Por ello, López Murphy cree que en un sprint de dos meses con todo en campaña puede ser competitivo. “Hoy la sociedad viró en la oferta, por eso crecieron Patricia y Milei”, piensa el Bulldog. En ese marco, su acuerdo con Bullrich goza de buena salud: la precandidata lo sube a sus viajes por el Interior.
Paralelamente, cerca del exministro de Defensa observan un espacio de “centroderecha sin oferta”. Un dato que lo alentó: en el electorado liberal hay un sector que lo asocia directamente a Javier Milei. ¿Habrá influido ese dato para que el libertario lo insulte en la Feria del Libro?.
