El desafío de los encuestadores no fue pronosticar el ganador. Todos proyectaron vencedor a Sergio Massa en la provincia de Buenos Aires. El verdadero problema de las encuestas fue predecir por cuánto ganaría el candidato del Frente Renovador. Y en esa tarea difícil, fueron mayoría los consultores que erraron en los últimos sondeos que difundieron la semana pasada.
Anoche, con 63 % de las mesas escrutadas, el intendente de Tigre le sacaba más de cinco puntos al kirchnerista Martín Insaurralde. Si se tiene en cuenta esa cifra, el trabajo que más se aproximó corresponde a la consultora MGMR. Federico González y Cecilia Valladares informaron en PERFIL que Massa ganaría por una brecha de 5,1 por ciento.
En los primeros lugares también se ubica Latam Research Group, cuyo estudio más reciente aventuró que el tigrense vencería por 4,7 puntos.
El podio lo completaba Carlos Fara y Asociados, que hace unos días dio a conocer sus cifras. El analista predijo una diferencia de 6,2 puntos entre el ex jefe de Gabinete y el postulante oficialista. Aunque tuvo una de arena: colocó tercero a Francisco De Narváez.
Sin embargo, la mayoría no acertó en los números. Un grupo grande comunicó un “empate técnico”, ya que encontraban una distancia a favor del Frente Renovador de entre dos y tres puntos. En ese pelotón se encuentra Poliarquía, de Sergio Berensztein, que sorprendió porque en la última elección de medio término había acertado. También Raúl Aragón de la Universidad de La Matanza y Nueva Comunicación de César Mansilla.
A la cola. Entre los últimos lugares se ubica Jorge Giacobbe y Asociados. El consultor estuvo lejos, aunque por un motivo distinto a sus colegas: le atribuyó a Massa una luz de 9,5 puntos, por sobre el intendente de Lomas de Zamora.
El último puesto corresponde a un estudio de Opinión Pública, Servicios y Mercados (OPSM). El trabajo de Enrique Zuleta Puceiro auguró una diferencia de apenas cinco décimas entre los dos principales candidatos.
En la última semana, hubo otros encuestadores que hablaron de “paridad técnica”. Entre ellos se encontraban los analistas Julio Aurelio (Aresco) y Roberto Bacman del Centro de Estudios de Opinión Pública (CEOP). Ellos coincidieron con ese análisis, pero —por algún motivo— no difundieron las cifras que lo sostenían.
