"Estaba plantado, infiltrado para hacer inteligencia política ilegal", dijo este miércoles 15 de marzo Marcelo Saín, experto en seguridad y ex ministro en Santa Fe, al declarar en contra de Américo Balbuena, retirado de la Policía Federal que simuló durante más de una década ser periodista de una agencia popular de noticias.
Saín fue uno de los ocho testigos propuestos por la querella que se presentaron ante el juez Daniel Rafecas, que dispuso que los alegatos de cierre del juicio por abuso de autoridad y violación de deberes de funcionario público será el próximo miércoles 22. En casi media hora, este testigo afirmó que "era imposible que Balbuena se dedicara a hacer militancia" ya que el Cuerpo de Informaciones de la PFA al que pertenecía "no se lo hubiera permitido".
"La misión del Cuerpo (al que pertenecía Balbuena) es producir información, contrainteligencia e inteligencia. (...) Balbuena estaba plantado, infiltrado para hacer inteligencia política ilegal", dijo después de explicar que dirigió una tesis de investigación acerca de la mencionada división policial, lo que le permitió acceder a detalles de funcionamiento.
Antes de que Saín entre a la sala de audiencias de la planta baja de Comodoro Py, el defensor de Balbuena, el ex fiscal Jorge Álvarez Berlanda, señaló al juez que el testigo está imputado en una causa por presunto espionaje ilegal en Santa Fe. Eso no impidió el desarrollo de la declaración en la que este ex ministro de Seguridad santafesino afirmó que "nadie puede hacer una vida entera en una agencia de izquierda perteneciendo a la Policía Federal".
Balbuena es juzgado junto a quienes eran sus jefes en la División Análisis de Seguridad Interior de la PFA, Alejandro Sánchez y Alfonso Ustares. Estos dos en la mira por haber sido quienes bancaron la infiltración de Balbuena. La querella, representada por el Centro de Profesionales de Derechos Humanos (Ceprodh), busca acreditar que este agente de inteligencia no ejercía el periodismo como un hobby, como él mismo dijo.
Verdú: "Me hizo una entrevista larguísima y nunca la vi publicada"
Uno de los testimonios más importantes de la jornada fue el de María del Carmen Verdú, integrante de la Coordinadora contra la Represión Policial (Correpi), una de las tantas personas referentes de organizaciones a las que Balbuena entrevistó en reiteradas ocasiones durante más de una década.
“Lo curioso es que el tipo podía estar todos los días en cualquier horario y no se movía. A mi (como abogada) me costaba estructurar mi vida profesional para ir a los juicios pero él estaba sentadito en todas las audiencias, se quedaba en los pícnics a charlar con nosotros y realmente hablábamos de tácticas o estrategias en el juicio con absoluta confianza. Mirando para atrás nos empezamos a dar cuenta por qué nos hacía infinidad de preguntas que después no salían publicadas”, sostuvo.
Casi todos los testigos hicieron referencia a que el trabajo de los periodistas de agencias populares siempre se limita a un breve periodo de tiempo ya que en general tienen otro trabajo distinto como fuente de ingresos.
Cuando le preguntaron por las entrevistas que Balbuena le hizo, Verdú recordó que "siempre quería obtener información interna, como cuánta gente integraba la organización, si había rentados, si recibíamos subsidios y hasta la relación con las demás organizaciones". Ante eso, "nosotros poníamos a disposición todos nuestros mecanismos internos con total confianza".
En esa línea, Verdú también se acordó que en una ocasión Balbuena le hizo una entrevista "larguísima" que nunca vio publicada.
Algunos rasgos de su testimonio condicen con lo que declaró el sociólogo y militante del Partido de los Trabajadores Socialistas Christian Castillo, quien sumó que en su caso "Balbuena se presentaba como movilero de la Agencia Walsh, pero lo peculiar era que su presencia siempre era mayor a la de cualquier movilero, porque llegaba primero y se iba último".
"Él era un habitué (de las movilizaciones y actividades de las organizaciones de izquierda). Tenía un lazo de conocimiento privilegiado de los dirigentes, y ya había cierta familiaridad", dijo. Cuando le preguntaron sobre cómo eran las entrevistas que hacía, Castillo respondió: "Preguntaba cómo eran los dirigentes, quiénes dirigían, cómo era la organización o cómo funcionaba, no era sólo la pregunta para sacar un concepto y listo".
La División Análisis y el vínculo con las organizaciones
Más allá de que la parte central de los testimonios apuntaba a describir cómo era la relación con Balbuena cuando se hacía pasar como periodista, otro de los ejes apuntó a establecer cuál era el vínculo que las organizaciones tenían con la División Análisis de Seguridad Interior de la PFA.
Ocurre que, como publicó ayer PERFIL, Sánchez, otro de los acusados, buscó justificar el rol que tenía esa oficina y su supuesta relación cotidiana con las organizaciones. "Cuidamos al cura párroco (José) Di Paola, apuntado por el narcotráfico; ayudamos a identificar en videos del caso Mariano Ferreyra y colaboramos con detenciones; nuestra gente trabajó en el relevamiento de la Av. 9 de Julio y medidas de seguridad durante los festejos del Bicentenario y ejercimos la gestión del conflicto”, había declarado.
En sentido contrario, el referente de Metrodelegados, Claudio Dellecarbonara, afirmó que "jamás tuve contacto con la Policía salvo cuando llegaba alguna orden de desalojo o represión" a las medidas de fuerza de trabajadores del subte porteño. "No tenemos nada que organizar con la Policía", agregó.
Por otro lado, Calos Lordkipanidse, víctima de la dictadura militar e integrante del Encuentro Memoria Verdad y Justicia, dijo que cuando había movilizaciones "dábamos aviso al Gobierno de la ciudad, qué iba a pasar y a dónde íbamos a ir" y eran ellos quienes le remitían la información a la Policía. "No íbamos directo a la comisaría a avisar", dijo, y agregó que no había contacto específico con la División que encabezaron Sánchez y Ustares.
Miriam Lewin: "Iosi está esperando que alguien lo convoque a identificar la conexión local"
Oscar Castelnuovo, ex integrante de la Agencia Walsh, y la ex diputada Vilma Ripoll fueron otros de los testigos que estuvieron en la audiencia.
Cómo sigue el juicio
El proceso oral y público contra el policía que simuló ser periodista para infiltrarse en la Agencia Rodolfo Walsh seguirá este jueves desde las 12:30.
Está prevista la declaración de Diana Kordon, psiquiatra y psicoanalista, y el perito informático Matías Castellani. Por el lado de la defensa se presentarán Roberto Zagame, presidente de la Cámara de Transporte Escolar de la Provincia de Buenos Aires; y Javier Echeverría, integrante de la División Análisis a la que pertenecían los acusados.
Se espera que declaren Balbuena y una posible ampliación de Sánchez.
Mientras tanto, Rafecas fijó una tercera audiencia para el 22 de marzo a las 14, día en la que serán los alegatos de cierre.
AS / ED